Un vuelo de Southwest Airlines se convirtió en escenario de pánico cuando los pasajeros fueron obligados a evacuar debido a un incendio causado por la batería de un teléfono móvil, un hecho que tuvo lugar el pasado viernes mientras el avión, que se preparaba para despegar hacia Houston, Texas, estaba estacionado en la puerta del Aeropuerto Internacional de Denver.
Testigos informaron a CNN que un teléfono inteligente comenzó a emitir humo y provocó que un asiento se incendiara, lo que llevó a la tripulación a ordenar una evacuación inmediata.
Jennifer Rodgers, una pasajera a bordo del vuelo 3316, relató a CBS News que el humo comenzó a llenar rápidamente la parte trasera de la cabina: “Todo el mundo vio el humo y alguien gritó: ‘¡Fuego!’”, recordó.
Posteriormente, los pasajeros fueron evacuados con rapidez. Quienes estaban ubicados en la parte delantera utilizaron el puente de embarque, mientras que los que estaban en la parte trasera se deslizaron por los toboganes de emergencia.
En medio del caos, Jaquetta Anderson describió cómo fue empujada hacia adelante mientras intentaba rescatar a sus dos perros. “La gente me gritaba que dejara mis cosas”, comentó en declaraciones recogidas por New York Post.
A pesar del susto y la confusión, solo dos personas resultaron heridas durante la evacuación. Un pasajero sufrió lesiones al salir del avión y otro tuvo que recibir atención médica por quemaduras en su mano debido al incidente. El vuelo finalmente aterrizó tres horas más tarde en su destino previsto.
La Administración Federal de Aviación (FAA) ha iniciado una investigación sobre este incidente. Los incendios relacionados con baterías de iones de litio han sido motivo de preocupación creciente en la industria aérea.
Recientemente, un episodio similar ocurrió en China cuando un banco de energía defectuoso causó alarma entre los pasajeros.