El primer ministro francés, Jean Castex, ha dispuesto la prohibición de celebrar actos litúrgicos públicos como medida sanitaria para hacer frente a la pandemia de Covid-19 que este lunes dejó otros 506 fallecidos, frente a los 302 del domingo.
Según ha informado en un comunicado de prensa la Conferencia Episcopal de Francia, el jefe de gobierno francés reiteró «con firmeza que las condiciones sanitarias no permitían que se reanuden a día de hoy las celebraciones públicas».
Según la nota de prensa, las autoridades francesas están preparando junto a la jerarquía episcopal del país «los protocolos necesarios para una recuperación controlada» de las misas a partir del 1 de diciembre si «las condiciones sanitarias lo permiten».
En este sentido, los obispos franceses avisan de que ya han presentado «un protocolo sanitario detallado» con el objetivo de poder reanudar «la misa en público» así como otras actividades pastorales ‘presenciales como el catecismo, respetando las condiciones de seguridad.
Desde el inicio de la epidemia, 45.054 personas han muerto en Francia por causa del virus. En las últimas horas se han registrado más de 9.406 nuevos casos, lo que eleva el total de contagios a 1.991.233. Francia está viviendo un segundo confinamiento con el que busca reducir los casos de Covid-19 a 5.000 diarios.
