La cantante Eva Amaral ha defendido haberse quitado su camiseta sobre el escenario quedándose con el torso al descubierto durante un concierto en el festival Sonorama. «Fue el acto de liberación más grande que he sentido jamás», ha asegurado la cantante para quien las críticas recibidas no han hecho que se arrepienta.
«Toda esa montaña de odio me da la razón. Lo volvería a hacer, no me arrepiento», ha indicado la artista en una entrevista en la Cadena Ser recogida por Europa Press en la que ha calificado de «muy bonita» la sensación de quedarse con el torso al descubierto.
«Fue la liberación más grande que he sentido jamás», ha indicado Amaral que ha recordado que las primeras filas del público la imitaron quitándose también la ropa. «Chicos, chicas, todo el mundo, fue precioso la verdad, hubo mucha gente llorando», ha indicado la cantante para quie esa reacción del público «por algo será». «Nos da que pensar que hay algo ahí que tiene que avanzar un poquito más todavía sobre igualdad», ha añadido.
La artista ha confesado que tomó la decisión de quedarse con el pecho al descubierto durante su concierto tres días antes y tuvo como «detonante» la actuación en Murcia de la cantante Rocío Ríos que, en el marco de las celebraciones del Orgullo LGTBi se quitó también su camiseta provocando que un agente municipal subiera al escenario para impedirlo. «Que subiera un policía a detener su concierto y que recibiera todos esos comentarios fue determinante. Me dio la sensación de que se sentía sola en esa lucha y que el mundo de la música no estaba reaccionando con ella. Poner un tuit no era suficiente». ha argumentado.
La cantante dice comprender que haya personas incómodas, a las que esta situación les haya podido remover, y que sigan viendo el pecho de la mujer como un tabú: «No digo que lo desexualicemos, pero tampoco que lo tapemos. No me parece que sea un acto de provocación que un hombre se quite la camiseta, por qué tiene que serlo que me la quite yo», se ha preguntado Amaral que ha recordado que «todos los días hay futbolistas celebrando los goles quitándose la camiseta y no pasa nada».
«A mi también me parece muy erótico el pecho de un hombre, pero no me abalanzo sobre él si se pone sin camiseta delante de mí en una playa o en un concierto», ha argumentado la cantante que ha insistido en que «hay gente que sale en pelotas al escenario y aquí no pasa nada».
Ha lamentado además que conforme «van pasando los años, la gente cada vez tiene más miedo a mostrase, más miedo a que le tomen una foto». «De repente Virginia Woolf se censura y una película de dibujos animados donde se besan dos chicas se censuran», ha explicado.
En su opinión, «no se puede ir hacia atrás». «Ya se que no gané ningún premio, ningún derecho esa noche, pero lo que no puede ser es que al día siguiente lo esté perdiendo, porque encima de un escenario somos libres, pero deberíamos serlo en nuestro día a día».
Y ha recordado cómo se censuró la portada del disco ‘Puta’ de Zahara, en el que la artista posaba como una virgen con un niño en brazos. «Nosotros pusimos un tuit de apoyo y nos llegaron cientos de mensajes de amenazas, de insultos; no me pudo imaginar lo que viviría ella», ha añadido Eva Amaral.