Nuevo bache de salud para Gisela en plena cuenta atrás para convertirse en madre por primera vez. La cantante, embarazada de 8 meses, ha tenido que volver a ser ingresada de urgencia en el hospital por problemas de riñón, como ella misma ha compartido con sus seguidores, lanzando un mensaje tranquilizador al revelar que su hijo -al que llamará Indiana- se encuentra perfectamente aunque no están siendo momentos fáciles para ella.
«El bebé está bien y sigue dentro de la barrigota… es mi riñón el que me ha llevado a volver a ingresar… pero de momento todo controlado… estoy en las mejores manos» ha publicado este viernes en Instagram con una imagen de sus manos apoyadas en su abultadísima tripita.
Un texto en el que la triunfita no ha dejado pasar la oportunidad de dar las gracias tanto a su urólogo y a su ginecóloga, como al resto de profesionales que la están tratando durante su hospitalización y «son de esas personas empáticas tan necesarias y tan importantes en momentos delicados de la vida».
«En nada a casa, a esperar a mi peque cuidándome mucho para que el horno no deje de funcionar» ha concluido, dejando entrever que en los próximos días regresará a su domicilio para descansar en la recta final de su accidentado embarazo.
Y es que tras años de lucha y varios intentos fallidos, Gisela cumplía su sueño de quedarse embarazada a los 44 años tras someterse a una fecundación in vitro. Mes y medio después sufría un desprendimiento del saco gestacional que le hizo estar postrada en una cama durante casi dos meses.
Cuando comenzaba a recuperar su rutina y a cumplir con sus compromisos profesionales, en diciembre era ingresada en el hospital por una piedra en el riñón. Un problema que sigue arrastrando -ya que no puede ser intervenida a causa del embarazo-, que le provoca fuertes dolores y por el que ha tenido que ser nuevamente hospitalizada, como la artista ha revelado en redes sociales, visibilizando lo durísimo que está siendo la que debería ser una etapa dulce para ella. Lo importante, como confiesa dando una lección de fortaleza, es que su bebé está bien y será en pocas semanas cuando le vea por fin la carita.