La salud mental ha sido el trending topic indiscutible en el 2021. La pandemia ha traído el – antes deseado – teletrabajo, confinamiento, crisis en muchos sectores, miedo e incertidumbre, lo cual ha repercutido en la salud mental de millones de personas y en la economía.
Sin duda, esta situación, que ya dura demasiado, ha generado un cambio de paradigma en toda la sociedad. Miles de personas en Europa y EE.UU. han dicho adiós a sus jefes porque no aguantaban más (“la gran resignación”).
Las últimas semanas del año ya están aquí y muy pronto se publicarán los rankings de las mejores empresas para trabajar. Se verá de nuevo que entre el 70% y el 80% de los empleados tienen entre sus propósitos de Año Nuevo el cambiar de trabajo y que la gran mayoría dice estar a disgusto con su empresa o su jefe.
Cambiar al 70% de los trabajadores de la empresa sería una labor descomunal en selección y formación e impactaría en el clima laboral y en los resultados. Pero que no cunda el pánico. La gran mayoría seguirá otro año más pegado a su silla y realizando su trabajo… Eso sí, sin ponerle muchas ganas. Esto repercutirá en una baja productividad, altas tasas de errores y de absentismo.
La captación y la retención del talento son los retos de siempre de las empresas. Pero el verdadero reto es el cuidado del talento, el cuidado de las personas que forman las empresas.
Este será uno de los grandes desafíos para los directivos de las empresas. El salario y los bonus ya no son suficiente, ni siquiera será el reclamo principal para captar a los mejores.
La importancia de contar con empleados comprometidos con la empresa
Jesús Ripoll, CEO de Helpers Speakers, una de las mejores empresas en fomentar el llamado engagement de los empleados, el compromiso de estos con su empresa, la ilusión por trabajar en equipo e identificarse y con los objetivos, cuenta algunas de las prácticas que están llevando a cabo las empresas que más y mejor cuidan de sus colaboradores.
Ripoll apunta “está demostrado: empleados felices, empresas rentables. Hay que olvidar las viejas fórmulas de motivación. No vale con sustituir la convención presencial anual, por una reunión online y decir que así nos hemos digitalizado”. Las reuniones convencionales de pseudofestivas (donde los directivos van desfilando y dando mensajes con muchos números, que nadie puede retener) aburren a los empleados y son una pérdida de tiempo y dinero. Los colaboradores quieren escuchar a personas inspiradoras y lo mejor es contar con un speaker profesional. Pero no basta con una dosis de motivación al año.
Las empresas tienen grandes oportunidades, especialmente a principios de año, cuando hay presupuesto disponible. La primera es poner a los colaboradores en el centro y desarrollar un plan de motivación anual, con mínimo un impacto de motivación mensual. La oportunidad de demostrar que de verdad se preocupan del bienestar de sus colaboradores.
La segunda oportunidad es formar en habilidades de gestión de equipos a todos aquellos que tengan personas a su cargo. En muchas ocasiones, se promociona a puestos de manejo de equipos a buenos trabajadores, pero no se les forma para ello.
“Nadie ha aprendido a montar en bicicleta viendo el tour de Francia en la televisión”
Raquel Sánchez Armán, cofundadora de Helpers Speakers, sugiere la tercera oportunidad, realizar actividades de team building, especialmente diseñadas para fomentar el trabajo en equipo, la comunicación, la tolerancia al estrés, la innovación y el liderazgo. “Nadie ha aprendido a montar en bicicleta mientras ve el tour de Francia, tumbado en el sofá de casa. Este tipo de actividades se están empezando a usar también en los procesos de selección de candidatos. Y sobre todo para fomentar la cohesión de equipos, la integración con otros departamentos y para aumentar el engagement”.
La cuarta oportunidad es el establecer el teletrabajo como algo voluntario, que cada colaborador pueda decidir qué días quiere teletrabajar y conseguir varias cosas: mejor conciliación de la vida laboral y familiar, menores pérdidas de tiempo en atascos, menor contaminación al reducir el uso de los coches… En definitiva, flexibilidad para tener empleados más felices y productivos.
La quinta oportunidad es enseñar herramientas para el control de la ansiedad y el estrés. Existen distintas técnicas que cada uno puede practicar durante unos minutos cada día para mantener el estrés bajo control. Los talleres de varios de los especialistas de Helpers Speakers son muy recomendables.
No hay que olvidar que “la salud mental o el buen clima en la empresa depende la actitud de cada uno”. Todos los colaboradores – independientemente de su posición en el organigrama – pueden fomentar el buen ambiente y proponer a sus jefes o a Recursos Humanos el realizar esas conferencias de motivación o actividades de team building.
Programas de liderazgo, salud y motivación en las empresas
Un empleado motivado tiene menos bajas, fomenta un buen ambiente de trabajo, es más creativo y rinde más y con menos errores, en resumen, es más productivo y garantiza el éxito de la empresa. Es fundamental que las empresas integren en sus iniciativas de Recursos Humanos programas sobre motivación, salud y liderazgo. Y para ayudar en todo ello, una opción es contar con Helpers Speakers y su lema “empleados felices, empresas rentables”.