La selección de Inglaterra, con un solitario gol de Raheem Sterling, se ha impuesto este domingo en su debut en la Eurocopa ante Croacia (1-0), un partido en el que, alentada por su público, doblegó a un combinado balcánico al que le faltó chispa pero que contuvo durante gran parte del choque las acometidas inglesas.
Con un Wembley entregado a pesar de contar con el aforo limitado a la mitad, los ‘Three Lions’ salieron dispuestos a apabullar a un rival que se limitó a contener el arreón inicial de los ingleses, encomendados a un Phil Foden que a punto estuvo de sorprender nada más empezar. En el minuto 6, el habilidoso extremo del Manchester City armó un disparo desde el pico del área que repelió el palo ante la atenta mirada de Livakovic. Sin embargo, a partir del primer cuarto de hora, los de Gareth Southgate fueron bajando el ritmo y permitieron al combinado balcánico crecer, aunque sin disponer de ocasiones claras.
Fue tras el paso por vestuarios cuando la selección británica encontró el premio a su insistencia, justo después de un disparo lejano del madridista Luka Modric; Kalvin Phillips recortó a Kovacic y envió un gran pase filtrado a Sterling, que solo ante el meta croata consiguió superarle, aunque con apuros, en el mano a mano (min.57).
El tanto espoleó a los de Southgate, que solo un par de minutos más tarde pudo incrementar la cuenta en un balón colgado al segundo palo al que llegó Harry Kane, que en su intento por marcar se golpeó con la madera y tuvo que ser atendido. La ocasión marcó el inicio de un partido mucho más abierto, en el que Rebic desaprovechó la oportunidad de igualar la contienda en un rechace en la frontal al que le pegó mal. Sterling también perdonó en el 74 en un balón botado que mandó a las nubes, pero el duelo fue muriendo para dejar a Inglaterra como líder del Grupo D.