La Guardia Civil ha abierto diligencias de investigación penal con respecto a un vecino de Gondomar (Pontevedra), de 51 años de edad, que supuestamente dejó morir de inanición a dos ovejas y una cabra de su propiedad, y cuyos cadáveres fueron localizados en el hueco cerrado de una escalera exterior.
Según han informado fuentes del Instituto Armado, el Seprona inició la investigación tras recibir un aviso de la Policía Local de Gondomar, que informó de la sospechosa muerte de dos ovejas en una parroquia de este municipio.
Los efectivos del Seprona realizaron una inspección en la finca y, en un hueco cerrado bajo una escalera exterior, localizaron los cadáveres de dos ovejas en avanzado estado de descomposición, así como los restos momificados de una cabra.
Personal técnico del servicio de Sanidad Animal de la Xunta acudió al lugar para determinar las posibles causas de las muertes, y valoraron que la hipótesis más probable es que los animales murieran por inanición.
La investigación concluyó con la identificación del propietario de los animales, que argumentó que no había podido atenderlos por motivos de salud y que éstos acabaron muriendo cuando se les terminó la comida y el agua que les había dejado.
Las diligencias fueron trasladas al juzgado de instrucción de guardia en Vigo, donde deberá comparecer el investigado cuando sea requerido por la autoridad judicial, por un supuesto delito de maltrato animal.