Isabel Pantoja cumple 68 años este viernes 2 de agosto, una fecha tradicionalmente cargada de significado y celebración en familia que ahora queda muy lejos. La tonadillera, conocida en estos momentos por su vida privada llevada con total discreción, ha optado por pasar desapercibida en los últimos años. Es raro verla salir a comer con amigas, pasear por las ciudades donde actúa o disfrutar de la playa como lo hacía antiguamente con sus hijos.
Lejos quedan las grandes fiestas que solía celebrar en Cantora por su cumpleaños. Este año, la cantante ha vuelto a soplar las velas en la más estricta intimidad junto a su hermano, Agustín Pantoja, y sus dos íntimas amigas que la han acompañado a este viaje.
Anoche, la Pantoja celebró su cumpleaños con el servicio de un catering en el hotel de Castellón donde se aloja. En las imágenes se aprecia la furgoneta de la empresa ‘La Tasca del Puerto’, de la cual un par de operarios bajaron dos neveras, una bandeja maletín y una paellera, entrando todo al hotel.
Esa misma tarde, la artista llegó a su hotel de Castellóntotalmente blindada. A bordo de una furgoneta con cristales tintados y con personal de seguridad velando por su entrada al parking del hotel, la tonadillera accedió al que será su alojamiento en la ciudad valenciana.
Esta celebración discreta contrasta con las épocas pasadas, pero sigue mostrando la esencia de una artista que prefiere la intimidad y la tranquilidad en estos momentos de su vida.
