Esta semana ha sido una de las más difícil para Isabel Pantoja, ya que después de tanto tiempo volvía a encontrarse en los juzgados de Málaga para testificar por un posible delito de insolvencia punible. Las imágenes, que han llamado mucho la atención y han sido muy criticadas por la falta de seguridad que hubo en las inmediaciones, hablaban por sí solas… pero lo cierto es que el tema judicial de la tonadillera ha quedado atrás por una exclusiva que ha dado Gema López.
La colaboradora avisaba desde primera hora de la tarde en ‘Sálvame Diario’ que tenía una ‘bomba informativa’ de la tonadillera, referente a su herencia y lo cierto es que las especulaciones empezaban a hacerse notar en redes sociales… hasta que la colaboradora ha soltado su información.
«Se reunió con un notario con un fin muy claro, Isabel Pantoja decidió rectificar su testamento para desheredar a sus dos hijos. El deseo es que el heredero de toda su masa hereditaria sea su hermano Agustín Pantoja» aseguraba Gema, lo que implicaría, siendo cierto, la ruptura total con sus dos hijos.
Pero… ¿cómo ha cambiado su testamento? Gema ha confesado que: «Ella ha echado mano del Código Civil y hay un argumento que ha dejado por escrito, que avala el Código Civil, el maltrato psicológico al que se ha visto sometida y en el caso de su hijo, las injurias graves continuadas con publicidad».
En cuanto a qué podría pasar a partir de ahora, la colaboradora nos explica que hay varias opciones, la primera de ella es que: «Kiko Rivera decida reunirse con su madre e Isabel podría redactar un nuevo testamento, pero para eso Kiko tendría que pedir perdón por escrito a su madre», de no ser así entonces «serían sus hijos quienes tienen que luchar por este testamento, que implicaría una guerra con Agustín Pantoja, que tendría que demostrar que ha existido lo que la cantante asegura».
La colaboradora no se quedaba ahí, también ha explicado que «tres o cuatro días antes de acudir a la audiencia, Isabel Pantoja se dejó ver en Sevilla porque fue a hacerse unos retoques a una clínica»… algo que, aunque solamente se ha especulado, podría explicar la sobreexposición que hubo en los juzgados.
