Israel utilizó su sistema de defensa antimisiles Arrow para derribar un misil balístico fuera de la atmósfera terrestre en lo que puede pasar a la historia como el primer combate en el espacio.
De acuerdo con The Telegraph, el misil fue lanzado desde Yemen por hutíes respaldados por Irán, volando así casi 1 600 kilómetros sobre la península arábiga. Su objetivo era llegar a la ciudad portuaria de Eilat.
Según el medio británico, se trataría del sistema Arrow 2, el cual es de propiedad de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Para derribar los miles, este mecanismo utiliza un interceptor hipersónico.
En un comunicado, la entidad dijo que el sistema rastreó la trayectoria del misil y lo interceptaron “en el momento y lugar operativo más apropiado”.
Las fotografías de Eilat mostraron un rastro de humo del interceptor Arrow, mientras que los residentes informaron haber escuchado una gran explosión desde el suelo.
Según lo que se conoce, el misil fue derribado por encima de la línea Karman, distinción que señala que desde los 100 kilómetros sobre el nivel del mar ya se puede considerar como el espacio.
Se cree que el misil balístico era un Qader, una versión mejorada del Shahab 3, diseñado por Irán. Estos pueden llevar una ojiva altamente explosiva y tiene un alcance que coloca a todo Israel a una distancia de ataque de los hutíes, quienes apoyan la causa palestina.
El sistema se utilizó previamente en 2017 para derribar un misil tierra-aire sirio que se dirigía a una ciudad israelí.
Ahora, el misil balístico generalmente sigue una trayectoria suborbital para lanzar una o más ojivas a un área predeterminada. Esta puede ser la “primera intercepción operativa de un misil balístico en el espacio”, según el reporte.
«La interceptación exitosa es mucho más que proteger a los residentes de Eilat y asestar un golpe a la jactancia de los hutíes», dijo un funcionario de defensa israelí. «Primeramente, demuestra a Irán, que estuvo detrás del lanzamiento y suministró el misil, que Israel tiene la capacidad de actuar contra su programa de misiles, y esto tiene implicaciones mucho más amplias para el conflicto regional».