El Gobierno de Israel no acudirá al foro de la Unión por el Mediterráneo (UpM) que se celebrará el lunes en Barcelona por su malestar con el «cambio de la agenda original», que ha implicado que la cita vaya a centrarse «exclusivamente» en el conflicto con el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
El octavo Foro Regional aspiraba a convocar a representantes de los 43 Estados miembro de la UpM, con el ministro español de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, como anfitrión y la presencia también del Alto Representante de Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell.
Sin embargo, Israel ha lamentado que se haya cambiado la agenda «sin consultar», de lo que teóricamente debería ser «una plataforma práctica para fomentar la cooperación entre distintos países en beneficio de todos los pueblos del Mediterráneo», han explicado fuentes diplomáticas de Europa Press.
Los cambios, han advertido estas fuentes, «perjudican el propósito de la UpM y corren el riesgo de transformarla en otro foro internacional en el que los países árabes critican a Israel». «Por tanto, Israel no tiene intención de participar en la reunión», han zanjado.
La agenda oficial establece como eje de los debates la situación en Israel y Palestina a raíz de la escalada del conflicto en la Franja de Gaza, así como los efectos colaterales para el conjunto de la región.
La UpM, copresidida por la UE y por Jordania, la integran en total 43 países: a los 27 Estados miembro de la Unión Europea se suman otros quince países mediterráneos –Albania, Argelia, Bosnia, Egipto, Israel, Jordania, Líbano, Marruecos, Mauritania, Mónaco, Montenegro, Palestina, Túnez, Turquía, Libia y Macedonia del Norte–.