El bailarín Joaquín Cortes, que regresará a los escenarios españoles el próximo 23 de diciembre con su espectáculo ‘Esencia’, ha recordado respecto a la actual situación de Rafael Amargo que «hay una justicia, pero la presunción de inocencia existe todavía».
«Ahí no voy a entrar porque son temas que se nos escapan a todos. Me da mucha pena, pero cada uno vive su vida y cada artista hace con su vida lo que quiere», ha señalado en una entrevista con Europa Press el bailaor flamenco.
«Si es culpable que pague, porque a mí no me parece bien las personas que se dedican a este tipo de cosas. Pero si luego lo han cogido y no es culpable, va a ser muy difícil quitarle el daño de imagen que ya está hecho para él», ha lamentado Cortés.
El artista recuperará para el próximo 23 de diciembre en el Wizink Center su espectáculo ‘Esencia’, que puso en marcha en el año 2017 y que tuvo que cancelar en Madrid a causa de una lesión. Para esta ocasión, estará acompañado de varios artistas que todavía están por confirmar, si bien ha adelantado que Estrella Morente será una de ellos.
«Lo que estamos haciendo es algo por la cultura y para concienciarnos tods en estos tiempos en que las instituciones y el Gobierno están ignorando a la cultura: hay que darle un tirón de oreja a los políticos», ha resaltado Cortés, quien sin embargo no se reconoce partidario de ninguna ideología.
«Yo no soy ni de derechas ni de izquierdas, al final todos hacemos nuestra propia política. A mí no es que me haya decepcionado el Gobierno, porque yo sigo pensando que a mí nunca (ningún Gobierno) me ha apoyado: mi carrera me la he labrado yo solo en el mundo sin ningún tipo de ayuda institucional», ha defendido.
De hecho, Cortés se considera «una marca mundial reconocida», por lo que no cree que necesite ese apoyo. «Vivo gracias al mundo, no a España, pero los dirigentes no hacen labor para nada porque no apoyan nada. Hay artistas que están empezando y que nadie les apoya, no potencian la cultura y es una pena», ha lamentado.
EL GOBIERNO Y LAS ‘OLVIDADAS’ ARTES ESCÉNICAS
De hecho, no cree que la pandemia de coronavirus pueda servir de excusa para esa ‘dejación de funciones’, puesto que «luego el mundo va a seguir». «El flamenco gusta y es un arte que nace aquí en Andalucía y fuera la gente se vuelve loca con él, pero en España no se le da todavía ese valor que tiene». ha alertado.
«Se piensa que los turistas vienen a España solamente por el Real Madrid o el Barcelona o por los chefs, pero no, la gente viene también por el flamenco y se interesan por descubrir nuestra cultura. Para el Gobierno cada vez existen menos las artes escénicas y si ves a países vecinos como Italia, Francia o Portugal, se gastan mucho más», ha destacado.
UNA SITUACIÓN «APOCALÍPTICA»
Cortés reconoce que se ha visto afectado por la pandemia principalmente por las precariedades que han tenido que sufrir gente cercana a él. «Se está pasando hambre, tener un aforo al 30% significa que los números no salen para los productores», ha reconocido.
«Esta situación es un palo increíble, porque son muchas familias que están sin comer, pero hay que luchar por la cultura. En mi caso, pasé la primera ola en mi casa de Lisboa un confinamiento casi voluntario, no lo he notado tanto. Pero esto ha sido muy duro para muchas personas y lo más importante es que garanticen que todo vaya bien con las vacunas y empezar a olvidarnos de este momento tan apocalíptico», ha concluido.