Una casa de Rhode Island que inspiró la saga de películas de terror que iniciaron en 2013, El Conjuro (The Conjuring) ofrece a los fanáticos de las cintas y a los investigadores paranormales aficionados la oportunidad de ir de “ghamping” (campamento fantasma) en la propiedad.
La estructura de Burrillville, apodada The Conjuring House después de ganar fama con la película dirigida por James Wan, informó que se han establecido ocho campamentos en la propiedad, cada uno con una carpa para 3 o 4 personas.
Los campamentos se pueden alquilar por $300 o $400 dólares la noche, y cada uno tiene su propia calificación de “factor de miedo” que se correlaciona con la “espeluznante” experiencia de acampar.
“Los visitantes deben traer su propio equipo para investigar lo que podrían esperar en la oscuridad porque esta excursión seguramente pondrá a prueba su capacidad para experimentar lo paranormal”, afirma el sitio web de The Conjuring House.
La casa real no se vio en la pantalla en “El Conjuro”, pero la residencia albergó los eventos de la vida real que sirvieron como base para la película. La familia Perron, cuyas vidas fueron dramatizadas en la película, reportó numerosas experiencias paranormales durante su década en el hogar.
The Conjuring House, que fue vendida a sus actuales dueños en 2021, también ofrece tours y rentas para eventos privados.
La historia real de The Conjuring
“The Conjuring” es una popular franquicia de películas de terror sobrenatural que ha cautivado al público con sus escalofriantes relatos de investigaciones paranormales.
Si bien las películas se basan en casos de la vida real manejados por los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren, muchos se han transformado para que sean más atractivos en la pantalla, como “el fantasma de la familia Perron”.
En la primera entrega de “El Conjuro”, se explora la inquietante familia Perron. La familia Perron, compuesta por Carolyn y Roger Perron y sus cinco hijas, se mudó a una casa de campo en Harrisville, Rhode Island, en 1971.
Experimentaron una serie de eventos inexplicables, que incluyeron voces incorpóreas, objetos que se movían solos y apariciones. Ed y Lorraine Warren investigaron el caso y afirmaron que era uno de los casos de casas embrujadas más aterradores que encontraron.
La historia de la familia Perron se convirtió en la base de la narrativa de “El Conjuro”
