La Mesa de la Comisión de Interior del Senado tiene la intención de descartar la comparecencia en la Cámara Alta de la actriz María García García, conocida artísticamente como Bárbara Rey, dando prioridad a otras solicitudes de asistencia, como las del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y otros altos cargos del Ministerio, según han informado a Europa Press fuentes parlamentarias.
Era este órgano, la Mesa de la Comisión de Interior, el encargado de decidir si llamaba a declarar en el Senado a la actriz Bárbara Rey por el dinero y prebendas que recibió tras su supuesta relación con el rey emérito Juan Carlos I.
En la mañana del jueves se conocía que el presidente de la Cámara Alta, remitió a la Mesa de la Comisión de Interior la decisión sobre la solicitud realizada por el senador de Compromís, Carles Mulet, para que Bárbara Rey explicara «las informaciones que apuntan a que recibió dinero público de fondos reservados para que no hiciese públicas sus supuestas relaciones con supuestos cargos del Estado».
De este modo, la Comisión de Interior, cuya Mesa, formada por tres miembros del PSOE y dos del PP, va a dar prioridad a otras comparecencias de altos cargos del Ministerio, entre ellos Marlaska, en vez de llamar a Bárbara Rey, por lo que esta solicitud finalmente se ‘quedará en el cajón’, según apuntan fuentes de la Cámara.
Por su parte, el PP arremetió contra la Presidencia de la Cámara Alta por «aceptar comparecencias del ‘cuore’ contra el rey emérito», aunque ahora, fuentes de la dirección del Grupo Popular en el Senado, señalan a Europa Press que no harán nada ni dirán nada más al respecto.
MATIZACIÓN DE COMPROMÍS
El senador de Compromís, Carles Mulet, había hecho esta solicitud con la intención de que Bárbara Rey «explicara la veracidad de las informaciones publicadas según las cuales supuestamente recibió por parte de personas del entonces CESID, u otros altos estamentos del Estado ingentes cantidades de dinero público de fondos reservados y posibles prebendas como la contratación por parte de una televisión autonómica para que no hiciese públicas sus supuestas relaciones con supuestos altos cargos del Estado».
Según informó el propio senador, la Mesa del Senado había aceptado la petición de comparecencia de la actriz, pero horas más tardes matizó que en realidad había sido el presidente de la Cámara el que había enviado la solicitud directamente a la Comisión de Interior.
Desde la formación valenciana alegaban que al coincidir la última reunión de la Mesa de la Cámara Alta con el envío a la comisión interpretaron que había sido la Mesa.