La XXVIII Cumbre Iberoamericana ha arrancado este viernes por la tarde en República Dominicana con un acto inaugural en la Fortaleza Ozama en la que no ha estado presente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que no ha conseguido llegar a tiempo desde Bruselas, donde ha asistido previamente al Consejo Europeo.
No obstante, España sí que ha estado representada en el arranque de la cita por el Rey Felipe VI, que siempre asiste a las cumbres iberoamericanas. El presidente, que ha viajado acompañado de su mujer, Begoña Gómez, se ha sumado a la cena que el mandatario dominicano, Luis Abinader, ha ofrecido a los asistentes.
El retraso de Sánchez ha provocado que tampoco lleguen a tiempo el primer ministro portugués, Antonio Costa, y el Alto Representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, que viajaban en el avión de presidente.
Tampoco ha llegado para el acto de apertura el presidente de Colombia, Gustavo Petro, aunque sí que tiene previsto asistir a la cumbre, donde finalmente serán doce los jefes de Estado asistentes.
No estará finalmente el presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien en el último momento ha delegado en su canciller, Yvan Gil, y hasta la fecha no ha acudido a ninguna Cumbre Iberoamericana pese a llevar diez años en el cargo.
El presidente brasileño, Luiz Inazio Lula da Silva, no se ha desplazado igualmente a Santo Domingo ya que tiene previsto un viaje a China que sin embargo ha tenido que aplazar un día por una neumonía.
Otras ausencias menos inusuales en este tipo de foros han sido la de los mandatarios de México, Andrés Manuel López Obrador, y el de Nicaragua, Daniel Ortega.
A ellos se han sumado también el presidente de El Salvador, Nayib Bukele; la presidenta de Perú, Dina Boluarte; el de Guatemala, Alejandro Giammatei; el de Panamá, Laurentino Cortizo, y el de Costa Rica, Rodrigo Chaves.
Tras el acto inaugural, que se ha cerrado con fuegos artificiales tras una actuación musical, los mandatarios y los cancilleres que han viajado en sustitución de los presidentes de su país van a mantener una cena.
La cumbre propiamente dicha arrancará el sábado por la mañana en el Centro de Convenciones del Ministerio de Exteriores dominicano. Los mandatarios mantendrán dos sesiones plenarias, una por la mañana y otra por la tarde, durante las que intervendrán por espacio de unos diez minutos.
Asimismo, está previsto un almuerzo en el Palacio Nacional de la República que se celebrará bajo el llamado formato de ‘retiro’, es decir, los jefes de Estado acudirán solos sin ningún asesor, para poder tratar de forma más íntima los asuntos que quieran abordar.
LOS LÍDERES APROBARÁN TRES DOCUMENTOS
De la cita saldrán un total de tres documentos que han acordado en el encuentro mantenido por la mañana los cancilleres, según ha informado la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) en un comunicado.
No figurará entre ellos el comunicado especial que se pretendía aprobar defendiendo una arquitectura financiera nacional más justa, flexible y equitativa que permita a los países de la región, en muchos casos de renta media, contar con los recursos necesarios para afrontar la recuperación económica.