Los costos de realizar una boda pueden ser bastante elevados según el lugar y el número de asistentes a la celebración, por este motivo, una de las estrategias utilizadas por las parejas que pretenden contraer las nupcias es pedir un aporte monetario a sus invitados, a modo de regalo. Sin embargo, un insólito caso se presentó en Reino Unido, donde los novios exigieron una alta suma de dinero a sus amigos para poder asistir al evento.
De acuerdo con uno de los comensales, que narró la situación a través de la red social Reddit, los novios enviaron un correo electrónico luego de confirmar la asistencia, adjuntando un link de pago para aquellos que se comprometieron a ir. Pensando que era opcional y que hacía parte de un fondo para pagar la luna de miel, el protagonista de esta historia decidió ignorarlo.
Sin embargo, días después ingresó en el enlace y se llevó una desagradable sorpresa al descubrir que el monto que debía pagar era de 2.000 euros. Al principio pensó que se trataba de una estafa así que decidió comunicarse directamente con el lugar de la boda para hacerles saber el cobro que estaban haciendo y allí le confirmaron que la información era correcta, que se trataba de una petición realizada por los novios para “permitirles tener la boda de sus sueños”.
Como ya había confirmado su asistencia, sin saber antes esta información, el invitado decidió sacar parte de sus ahorros para poder ir al compromiso y acompañar a la pareja. Cuando llegó el día, pensó que su inversión podría librarse de alguna manera con la barra libre del lugar, pero su sorpresa fue aún mayor al enterarse de que ni la alimentación ni las bebidas estaban incluídas en la tarifa.
De esta manera, tuvo que sacar más dinero para poder cenar, pero su pesadilla no terminó ahí. Al finalizar el evento, todos los asistentes se vieron obligados a pagar una propina de 200 euros al lugar, lo cual fue algo inesperado, teniendo en cuenta que en el Reino Unido no es habitual agradecer al lugar de esta manera.
Finalmente, al protagonista de esta historia no le quedó dinero suficiente para pagar los costos extra de la boda y tuvo que negociar con el lugar la posibilidad de dejarles una propina más baja.
