El Campeonato Europeo de la UEFA, conocido como Eurocopa, podría tener un impacto económico de hasta 2.000 millones de euros en ingresos para la anfitriona Alemania, según un informe de Freedom24.
Así, se espera que Alemania crezca este año en torno al 0,3%, más lentamente que otros grandes países industrializados, pero la Eurocopa 2024 podría suponer un impulso a corto plazo para los sectores relacionados con el turismo y los servicios.
El informe atribuye este impulso a corto plazo a varios motivos, como el aumento del número de visitantes, lo que supone un aumento de la demanda de hoteles o restaurantes; una mayor demanda de trenes, autobuses y taxis, y el crecimiento de las ventas de tiendas de productos deportivos.
Por otro lado, la organización de torneos de la magnitud de la Eurocopa implica la construcción de instalaciones deportivas, hoteles e infraestructura pública, lo cual puede estimular el sector de la construcción. A su vez, aumenta la demanda de empresas de gestión de eventos, seguridad y logística, así como de viviendas de alquiler a corto plazo.
Por supuesto, la propia venta de entradas para los partidos de fútbol de selecciones supone una fuente de ingresos directos, junto con los ingresos por publicidad y patrocinio, y toda esta actividad económica conlleva a mayores ingresos fiscales derivados de impuestos sobre las ventas relacionadas con el turismo.
LA BOLSA DEL CAMPEÓN MUNDIAL SUELE SUPERAR AL MERCADO GLOBAL EN UN 3,5%
Asimismo, por lo que se refiere a las tendencias históricas en las bolsas, en los últimos cinco torneos, Grecia y España han superado al índice paneuropeo STOXX 600 tras sus victorias en 2004, 2008 y 2012, y sólo la victoria de Portugal en 2016 mostró un retraso significativo.
La bolsa del campeón del Mundial de la FIFA ganador suele superar al mercado mundial en un 3,5% en el mes siguiente a la final. Todos los ganadores de un Mundial desde 1974, excepto Brasil en 2002, han mostrado un rendimiento superior a corto plazo, aunque esta ventaja disminuye «notablemente» al cabo de tres meses.
Así, aunque el sentimiento positivo puede impulsar los mercados a corto plazo, la bolsa del país ganador suele rezagarse alrededor de un 4% al año siguiente.
