La Fundación Reina Sofía, entidad mixta de carácter benéfico y cultural Y sin ánimo de lucro , ha realizado más de 200 proyectos con decenas de entidades sociales en sus 45 años de existencia. La organización celebra este martes, 17 de mayo, su aniversario tras su constitución en 1977 con un pequeño capital aportado personalmente por la Reina Doña Sofía, presidenta ejecutiva de la Fundación que lleva su nombre.
El trabajo de la fundación se ha distribuido en cuatro áreas principales de actuación: Acción Social, Investigación en enfermedades neurodegenerativas, Medioambiente y Educación, de los que se han beneficiado miles de personas, principalmente niños, mayores, personas con discapacidad, y población desfavorecida o afectada por catástrofes naturales.
Solo en los últimos cinco años, la Fundación ha empleado un total de 5.600.000 euros de los cuáles se ha destinado un 47% a proyectos de investigación en Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas, un 33% a proyectos sociales, un 12% a proyectos medioambientales, y 8% a proyectos de educación entre otros.
Este año 2022 la actividad de la Fundación estará marcada por el esfuerzo en la investigación en Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas, como Párkinson, ELA y Huntington. En este sentido, tendrá lugar el acontecimiento «Enfermedades Neurodegenerativas NEURO 2020/22», impulsado por la Fundación mediante la celebración del «Global Summit Neuro 2020/22». Se trata de un congreso de carácter internacional, presidido por la Reina Doña Sofía, que reunirá del 21 al 24 de junio a los principales expertos en la materia y será acogido por la ciudad de Salamanca.
ETAPAS DE LA FUNDACIÓN
Durante estos años, la Fundación ha tenido cuatro etapas bien diferenciadas. En su primera etapa, las actividades tenían un perfil de trabajo y se centraban en mitigar precarias situaciones personales o familiares que llegaban a su conocimiento a través de las solicitudes de diferentes entidades que conocían esas situaciones de desamparo.
Con posterioridad, en su segunda etapa, en el año 1994 y como consecuencia de la promulgación de la primera Ley de Fundaciones, se iniciaron ya proyectos con la colaboración de organizaciones de reconocido prestigio.
La tercera etapa dio comienzo con la modificación de la Ley de Fundaciones y la de incentivos al Mecenazgo en el año 2002, que posibilitó el inicio del denominado Proyecto Alzheimer a instancias de S.M. la Reina Doña Sofía, cuyo primer hito fue la construcción del Centro Alzhéimer Fundación Reina Sofía que cumple quince años de existencia desde su inauguración el 8 de marzo de 2007.
La cuarta y última etapa de la Fundación se inició como consecuencia de la crisis económica de 2009 en la que, continuando el gran esfuerzo en la investigación en Alzheimer ampliada a otras enfermedades neurodegenerativas, se incrementan los proyectos sociales prioritariamente en España, colaborando para ello con los Bancos de Alimentos, Cáritas, Cruz Roja etc. Todos estos esfuerzos se redoblaron por el impacto social de la pandemia. También en esta etapa se incide en la sensibilización y protección medioambiental.
El Proyecto Alzheimer que se desarrolla a partir de la tercera etapa de la Fundación dio a luz al Centro Alzheimer Fundación Reina Sofía, un complejo asistencial de referencia en Alzheimer del que se han beneficiado miles de personas. En el centro se aborda simultáneamente la enfermedad desde tres ángulos complementarios: investigación, formación y servicio asistencial para enfermos.
Este espacio se compone de una residencia, un centro de día y un centro de formación, cedidos por la Fundación gratuitamente a la Comunidad de Madrid para ser integrados en su red pública asistencial; y de una Unidad de investigación donde la Fundación Reina Sofía realiza su actividad de investigación en enfermedades neurodegenerativas junto a la Fundación CIEN del sector público estatal.
