La tasa de inflación interanual de la zona euro se ha situado en noviembre en el 4,9%, ocho décimas por encima de la subida observada en octubre, lo que supone el mayor encarecimiento de los precios en la región del euro de toda la serie histórica, según el avance del dato publicado por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.
Según los datos de Eurostat, el fuerte repunte de los precios de la zona euro en noviembre responde a la subida interanual del 27,4% de la energía, frente al 23,7% de octubre, mientras que los alimentos frescos subieron un 1,9%, por encima del alza del 1,4% del mes anterior.
A su vez, los precios industriales no energéticos aumentaron en noviembre cuatro décimas más que en octubre, hasta el 2,4% interanual, mientras que los servicios se encarecieron un 2,7%, seis décimas más.
Al excluir del cálculo el impacto de la energía, la tasa de inflación interanual de la zona euro subió al 2,5% desde el 2% del mes anterior, mientras que al dejar fuera también el efecto de los precios de los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, la tasa de inflación subyacente subió al 2,6% desde el 2% del mes anterior.
Se trata de la lectura más alta de la tasa de inflación subyacente de la zona euro de toda la serie histórica.
Entre los países de la UE, las mayores subidas interanuales de los precios correspondieron en noviembre a Lituania (9,3%), Estonia (8,4%) y Letonia (7,4%), mientras que los incrementos más moderados se registraron en Malta (2,3%) y Portugal (2,7%).
En el caso de España, la tasa de inflación armonizada se situó en noviembre en el 5,6%, lo que implica un diferencial de precios desfavorable respecto de la zona euro de siete décimas, frente a los 1,3 puntos porcentuales del mes de octubre.
El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, advertía este lunes de que la economía de la zona euro se encuentra «en una encrucijada» en la que se observa, por un lado, una recuperación clara, mientras que, por otra parte, aumenta la incertidumbre derivada de los problemas de oferta y los rebrotes y nuevas variantes del virus Covid, aunque reconocía que «la inflación es el elemento más preocupante».