La carrera espacial entre rusos y estadounidenses tiene entre sus anécdotas la interpretación de La Internacional, a cargo de una nave espacial soviética desde la órbita lunar, hace ahora 55 años.
La Unión Soviética lanzó el 31 de marzo de 1966 su nave no tripulada Luna 10. Por primera vez en la era espacial, la sonda logró colocarse con éxito en órbita lunar el 4 de abril.
La nave espacial llevaba un conjunto de osciladores de estado sólido que se programaron para reproducir las notas de La Internacional, y que fuera transmitida en vivo al 23 Congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), reunido esos días.
Durante un ensayo en la noche del 3 de abril la reproducción fue bien, pero a la mañana siguiente, los controladores descubrieron que faltaba una nota y reprodujeron la cinta de la noche anterior durante la sesión del Congreso, alegando que era una transmisión en vivo desde la Luna.
Luna 10 recibía suministro eléctrico de baterías y funcionó durante 460 órbitas lunares y 219 transmisiones de datos por radio, hasta el 30 de mayo de 1966, informa Wikipedia.
Los instrumentos científicos consistían en un espectrómetro de rayos gamma para el rango de energías de 0,3 a 3 MeV, un magnetómetro triaxial, un detector de meteoritos, instrumentos para estudiar el plasma solar y las emisiones de infrarrojos de la Luna y también la radiación en el ambiente cislunar. También realizó estudios gravitacionales.
El programa Luna o Lunik estuvo integrado por una serie de sondas automáticas soviéticas desarrolladas por el científico Serguéi Koroliov, dedicadas a fotografiar y estudiar la superficie de nuestro satélite, la Luna.
El programa lo formaron 24 unidades, lanzadas entre el 2 de enero de 1959 y el 9 de agosto de 1976, algunas de las cuales regresaron a nuestro planeta con muestras del suelo lunar.