La militancia de Junts ha decidido romper la coalición con ERC y que el partido salga del Govern de Pere Aragonès con el 55,73% de los votos de la consulta que ha celebrado entre el jueves y este viernes.
En un comunicado, la formación ha anunciado que el ‘no’ a seguir en el Govern ha obtenido el 55,73% y el ‘sí’ ha tenido un 42,39% de apoyos, mientras que ha habido un 1,88% de votos en blanco, en una votación en la que han participado el 79,18% de los 6.465 militantes con derecho a voto.
A las 17.30 se ha reunido la Ejecutiva del partido para analizar este resultado, que supone la ruptura de la alianza entre ERC y Junts en la Generalitat y puede tener consecuencias en el seno de la formación liderada por Laura Borràs y Jordi Turull.
GOVERN DE ERC EN SOLITARIO
Con la salida de Junts del Ejecutivo, se rompe la coalición que ha gobernado Cataluña desde 2016 y ERC gobernará en solitario, ya que en los últimos días los republicanos han dejado claro que no convocarán elecciones.
De esta manera, será el primer Govern en solitario en Cataluña desde el de CDC encabezado por Artur Mas en 2015 cuando salió UDC del Ejecutivo, y será el que tendrá menos apoyos parlamentarios de la historia del Parlament, ya que los republicanos tienen 33 diputados en la Cámara catalana.
Esto obligará a Aragonès a buscar el respaldo de otras formaciones, incluidas el PSC y los comuns, para sacar adelante sus proyectos y el primer reto que tendrá el Govern republicano será el de tratar de aprobar los Presupuestos de la Generalitat de 2023.
Ahora está por ver cuál será la reacción del presidente ante la salida de Junts del Govern y cómo configurará su gobierno con miembros de su partido, ya que tendrá que renovar a la mitad del Consell Executiu con carteras importantes como Economía y Salud.
CONSECUENCIAS EN JUNTS
Al pasar a la oposición, Junts deberá abrir el debate de qué papel lleva a cabo en el Parlament, y valorar los réditos que le puede conllevar realizar una oposición dura o conceder apoyos puntuales a los republicanos en votaciones claves como la de los Presupuestos.
Otras de las incógnitas de este resultado son las posibles consecuencias que se puedan suceder en el seno del partido, cuya dirección está dividida entre los partidarios y contrarios de abandonar el Ejecutivo catalán.
El mismo conseller de Economía, Jaume Giró, que forma parte de Ejecutiva, ya advirtió el jueves de que seguirá «como militante de base» si Junts abandona el Govern, insinuando así que podría dejar la dirección si ganara esta opción.
Este resultado refuerza a los que se han posicionado a favor de salir del Govern, como Borràs; el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont; tres de los cuatro vicepresidentes de Junts –Josep Rius, Francesc de Dalmases y Aurora Madaula–; la consellera de Investigación y Universidades, Gemma Geis; el exvicepresidente del Govern Jordi Puigneró; el secretario de Organización, David Torrents; el eurodiputado Toni Comín; la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas, y los diputados Jaume Alonso-Cuevillas y Joan Canadell.
Por contra, queda debilitado el sector que ha defendido continuar en el Govern, entre los que se encuentran los consellers Jaume Giró, Victòria Alsina, Lourdes Ciuró y Violant Cervera; el exsecretario general, Jordi Sànchez; los exconsellers Josep Rull, Quim Forn y Damià Calvet –que es el presidente del Port de Barcelona–; el exalcalde Xavier Trias y los concejales en Barcelona, y el diputado y secretario general adjunto de Junts, David Saldoni.
El secretario general del partido, Jordi Turull, finalmente evitó posicionarse apelando a la neutralidad que, a su juicio, había pedido la Sindicatura Electoral de la consulta, y tampoco se han pronunciado la alcaldesa de Vic (Barcelona) y vicepresidenta del partido, Anna Erra; la líder de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, y la portavoz en el Parlament, Mònica Sales.