Con la humanidad cada vez más cerca de su regreso a la Luna, las agencias espaciales más importantes del mundo están trabajando en sistemas de navegación por satélite para poder facilitar los viajes desde la Tierra.
En este sentido la NASA y la ESA están trabajando en sistemas tipo GPS que serán instalados en los cohetes que viajarán entre los más de 384 400 kilómetros. ¿Cómo funcionarán?
GPS y navegación por satélite en el espacio
La única forma actual de ir del punto A al punto B en el espacio es hacer complicados cálculos basados en la física, personalizados para cada misión. A medida que la nave espacial se desplaza por el espacio, el único punto de referencia es la Tierra. Por lo tanto, necesita enviar una señal al planeta para comprender dónde está.
Según Elizabeth Rooney, ingeniera senior de Surrey Satellite Technology Ltd., a Insider, “la forma más económica de llevar la navegación por satélite al espacio profundo es aprovechar los satélites alrededor de nuestro planeta”. La compañía está trabajando con la ESA para desarrollar la navegación por satélite en el espacio.
En 2019, cuatro satélites pudieron determinar su posición en el espacio utilizando señales de los satélites GPS de la Tierra. Sin embargo, fue aproximadamente a la mitad del camino hacia la Luna.
Para el sector restante, se están enviando sondas que intenten captar las señales desde la Tierra. La ESA enviará a NaviMoon a través del satélite Lunar Pathfinder: se cree que podría determinar la posición de las naves con una precisión de 60 metros. Se espera que la sonda pueda navegar de forma autónoma en la órbita lunar.
Por el lado estadounidense, se enviará su propia sonda detectora desarrollada con apoyo de la Agencia Espacial Italiana. Su objetivo es lanzar el primero de estos receptores a la superficie de la luna en 2024 como parte del Experimento del receptor Lunar GNSS.
Redes en conjuntos
Con Pathfinder se iniciará una flota de satélites que mantendrá comunicado a la futura colonia que radicará en la Luna. El sistema de la agencia espacial europea se llamará Moonlight.
La ESA quiere probarla de forma inicial en 2027 para luego forjar una infraestructura más completa en 2030.
La NASA, por su parte apoyará con LunaNet, una red propia que trabajará en conjunto con Moonlight.
Más adelante, los colonos lunares podrían tener acceso a Internet de alta velocidad, videoconferencias con sus seres queridos en la Tierra, transmitir programas y crear su propio contenido desde el espacio.