La NBA y la Asociación Nacional de Jugadores de Baloncesto (NBPA) han acordado que no se realicen pruebas aleatorias de detección de marihuana entre los jugadores esta temporada, ha anunciado la liga norteamericana, el mismo día en que la Cámara de Representantes de Estados Unidos votó a favor de legalizarla.
En marzo, cuando se detuvo la competición por la pandemia de coronavirus, la NBA dejó de realizar pruebas de detección de drogas por completo. Ya en la ‘burbuja’ de Orlando, con la liga retomada, se recuperaron los test para detectar drogas para mejorar el rendimiento, pero no de marihuana.
La liga anunció que las pruebas continuarán esta temporada, que comienza en solo 18 días. «Debido a las circunstancias inusuales por la pandemia, hemos acordado con la NBPA suspender las pruebas aleatorias de marihuana para la temporada 2020-21 y enfocar nuestro programa de pruebas aleatorias en sustancias que mejoran el rendimiento y en drogas de abuso», señaló en un comunicado.
Los jugadores rara vez son suspendidos por pruebas positivas de marihuana. La política actual determina que los jugadores serán suspendidos cinco partidos si dan positivo tres veces, con multas y un programa antidrogas para los dos primeros positivos. Solo se someten a test para detectar todo tipo de drogas cuatro veces por temporada.
La estrella de Brooklyn Nets Kevin Durant había pedido a la NBA que eliminara permanentemente la marihuana de su lista de sustancias prohibidas mientras se rehabilitaba de un desgarro en el tendón de Aquiles el año pasado.