La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido sobre los peligros que suponen los mosquitos, considerados uno de los animales más letales que existen debido a las enfermedades que transmiten, que causan cientos de miles muertos y enferman a cientos de millones de personas cada año.
Así lo ha destacado en el Día Mundial del Mosquito, celebrado cada 20 de agosto con el objetivo de concienciar sobre este insecto. La agencia sanitaria ha recordado que deben tomarse medidas de protección ante ellos, pues pueden transmitir enfermedades como la chikungunya, la filariasis linfática, la encefalitis japonesa, la malaria, la fiebre del Valle del Rift, la fiebre amarilla y el virus del zika. De hecho, solo a causa de la malaria, más de 600.000 personas mueren cada año.
La OMS ha hecho hincapié en el drástico aumento en los últimos años de los casos de dengue, que acumula más de 11 millones de casos en 80 países, pero cuyo incremento más notable se observa en América Latina. Los casos de dengue se han triplicado en la región con respecto al año pasado y en ella se concentran cerca del 85 por ciento de los casos notificados a la OMS a nivel global.
Según los datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) el número de casos de dengue registrados durante el primer semestre de 2024 superó al máximo número de casos anuales reportados en la historia documentada de la región. Al término de junio, se habían notificado más de 9,2 millones de casos de dengue, con al menos 6.500 muertes y más de 24.000 cuadros graves relacionados con la enfermedad.
Brasil es el país con el mayor número de infecciones, con casi 6,3 millones de casos sospechosos, seguido de Argentina (420.867 casos sospechosos), Paraguay (257.667 casos sospechosos) y Perú (199.659 casos sospechosos) hasta fines de mayo.
Para hacer frente a este insecto, la OPS ha recomendado medidas de protección y movilización comunitaria, como dormir bajo mosquiteras impregnados con insecticida, llevar mangas y pantalones para cubrir las extremidades, utilizar repelentes que se puedan aplicar en la piel expuesta o la ropa, y emplear mallas o redes contra mosquitos en puertas y ventanas.
A nivel comunitario, ha llamado a implementar un plan de acción rápido enfocado en prevenir la formación de criaderos del vector y la eliminación de estos para evitar la transmisión y en informar de los síntomas y signos de alarma del dengue cuando la situación epidemiológica del país lo requiera, como por ejemplo ante el aumento de casos o defunciones por la enfermedad.
También ha instado a las autoridades sanitarias, entre otras acciones, a fortalecer las medidas para la eliminación de criaderos del vector en domicilios y en áreas públicas comunes, a reorganizar los servicios de recolección de residuos sólidos para apoyar las acciones de eliminación de criaderos priorizando las áreas de mayor transmisión y a aplicar medidas para el control de criaderos a través de la utilización de métodos físicos, biológicos o químicos, que involucren en forma activa a los individuos, la familia y a la comunidad.
La OPS ha recordado que para interrumpir la transmisión en el momento en que esta se produce de manera intensiva es crucial la eliminación de mosquitos adultos infectados con el virus del dengue, bien mediante la fumigación intradomiciliaria utilizando equipos individuales, o bien a través de la fumigación espacial utilizando equipos pesados montados en vehículos, sumado a la destrucción o control de criaderos del vector dentro de los domicilios y sus alrededores.