La población joven atendida por Cruz Roja española se ha duplicado en el escenario de pandemia y hasta un 29% dicen no tener capacidades en competencias digitales a pesar de ser nativos digitales, según una encuesta realizada por la ONG sobre los jóvenes y el reto de la digitalización.
«La población joven atendida por Cruz Roja casi se ha duplicado en el escenario pandemia, en relación al período anterior. La mayoría de los participantes en los programas son personas en riesgo cuyas familias tienen dificultades para mantenerles y afrontan una muy difícil emancipación obligada, en condiciones de vulnerabilidad, baja o no reconocida cualificación, desempleo, extrema precariedad laboral o trabajo sumergido y escaso nivel de competencias digitales para el empleo, entre otras circunstancias», señala el presidente de Cruz Roja española, Javier Senent.
Además, apunta que algunos de estos jóvenes han experimentado o experimentan actualmente la exclusión social, habiendo vivido situaciones de calle o dificultad para la supervivencia. El 76,3% de los hogares están en riesgo de pobreza y exclusión social y un 61,9% en pobreza extrema.
Así lo indica en la introducción del informe de Cruz Roja ‘Los y las jóvenes y el reto de la digitalización en la COVID-19: competencias para la vida, el empleo y la educación’, que explora y analiza, entre otras cuestiones, los factores de riesgo a los que se enfrenta este grupo de la población.
De los datos del estudio se desprende que un «escaso» 22% a 27% manifiesta habilidades en competencias digitales, teniendo en cuenta además que «solo» están formados o capacitados entre el 14% y el 21%. Por su parte, entre un 19% y un 29% reconoce no tener estas capacidades digitales.
Asimismo, el informe muestra que la mitad de las personas encuestadas dice no utilizar las TIC para la búsqueda de empleo y «solo» un 30% las utiliza como herramienta de trabajo.
Según advierte Cruz Roja, el uso excesivo del móvil, que ha pasado a ser una «prótesis humana» hace que el ser humano vaya adquiriendo unas capacidades cognitivas, en detrimento de otras necesarias para la comprensión de procesos más complejos de aprendizaje y conocimiento.
«Aunque son nativos digitales, un uso excesivo del móvil, en detrimento de otros equipos, no ayuda a mejorar las competencias digitales de los y las jóvenes», explican desde Cruz Roja.
El personal de Cruz Roja menciona la necesidad de la juventud de querer tener todo resuelto de inmediato, como un elemento negativo del uso abusivo del móvil y de Internet, elemento que dificulta procesos de búsqueda e inserción laboral, los cuales funcionan con otras lógicas diferentes.
Además, la ONG advierte de que la desinformación sobre determinadas funcionalidades digitales de utilidad social, cultural, política, administrativa, jurídica o laboral o la dificultad en su uso por ser menos intuitivas que las aplicaciones móviles, puede ocasionar que se encuentren con información errónea o incluso fraudulenta.
En este sentido, a Cruz Roja le preocupa «especialmente» su «nivel de desinformación» sobre seguridad, privacidad y protección en el marco de la Ley de Protección de Datos.
Así, el 44% de los jóvenes encuestados es consciente de que lo que publica en las redes sociales puede influir en su futuro pero no les preocupa; frente a un 30% que siendo consciente, manifiesta preocupación por ello. Por su parte, un 25% dice desconocer este riesgo.