El arte se puede expresar de diferentes maneras y siempre es espectacular, o que lo diga Ben Koracevic, el hombre que crea piezas de colección utilizando clavos e hilo. A simple vista, sus esculturas parecen hechas con lápiz, pero el trabajo va mucho más allá.
Este artista, con clavos, contornea la figura de lo que va a realizar y luego empieza a dibujar con diferentes tipos de hilo.
Una sola obra de Ben Koracevic puede ocupar 2.500 metros de hilo y miles de clavos. Todas estas esculturas tienen creatividad, pasión y muchísimas horas de trabajo.
El llamado chico del arte de cuerdas tiene más de 118.000 seguidores en su cuenta de Instagram, lugar en el que los internautas no se ahorran ningún elogio a la hora de hablar de sus creaciones.