El Gobierno de Asturias participa en la puesta en marcha del ‘Pasaporte rupestre Unidos por el primer arte’, lanzado por las comunidades y las regiones que albergan cuevas y sitios al aire libre declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Las comunidades que impulsan el pasaporte junto con Asturias son Cantabria y Castilla y León, además del Consejo Departamental de La Dordogne (Francia) y la Fundación Côa Parque de Portugal, que desde 2016 trabajan en común para la conservación, difusión cultural y usos turísticos sostenibles de los lugares abiertos al público, a través del Protocolo de cooperación en materia de patrimonio rupestre.
El nuevo documento conllevará ofertas, servicios y premios con el fin de estimular la formación de una comunidad de personas interesadas en el arte rupestre, además de promover el movimiento e intercambio de visitantes entre las regiones que sustentan la iniciativa.
Asimismo, permitirá a sus promotores disponer de estadísticas de interés sobre fidelización de visitantes, valoración de la calidad de las visitas y tráfico en redes sociales de los destinos; unos datos que ayudarán a mejorar la calidad de los servicios.
El Pasaporte rupestre es una herramienta de coleccionismo cultural y de promoción que permite a los viajeros registrar su visita en los destinos rupestres de las cinco regiones. Se presenta en cuatro idiomas: francés, español, portugués e inglés, y en formato físico y virtual, dos modalidades que pueden tener carácter complementario.
Por un lado, se han impreso 10.000 pasaportes de papel en los que se irán estampando los sellos identificativos de cada destino. Los sellos de tinta son de formas, colores y diseños diferentes e incluyen siempre el logo o la representación rupestre identificativa del destino.
Por otro lado, la empresa Mobente ha desarrollado un pasaporte virtual en formato de aplicación para Android e IOS. Así, además de poder sellar digitalmente la visita mediante la captura de códigos QR ubicados en los destinos, ofrece información sobre los sitios visitables y su arte rupestre, al tiempo que permite valorar los destinos o compartir la experiencia en las principales redes sociales.
Quienes deseen obtener el documento en papel, podrán hacerlo en las taquillas y puntos de información de los 32 sitios adscritos. Por su parte, la aplicación del pasaporte está disponible, tanto en la app store de Apple, como en la Play Store de Android.
PREMIOS A LA FIDELIZACIÓN
La acumulación de registros en cada uno de los destinos permite obtener descuentos, acceder a promociones en establecimientos colaboradores de las comarcas ubicadas en torno a los sitios rupestres y recibir regalos. Una vez obtenidos 10 sellos el usuario podrá solicitar por correo electrónico un premio, que consistirá en un libro o una pieza de promoción comercial rupestre.
Con cinco sellos más, se obtendrá un nuevo galardón y, con el total de 32, el usuario recibirá un diploma acreditativo y un regalo singular por gentileza de las cinco entidades promotoras.
Para optar a los premios y al diploma es necesario, en el caso del pasaporte rupestre impreso, enviar copia escaneada de las páginas con los sellos (indicando el tiempo que se ha tardado en realizar la colección de visitas).
Por su parte, la aplicación digital dispone de un mecanismo para reclamar directamente los obsequios cuando se obtienen los distintivos cierva (10 visitas), caballo (15) y bisonte (32). Existe un correo electrónico y un teléfono de atención a los usuarios, gestionados por la unidad técnica del Itinerario Cultural Europeo de Arte Rupestre, con sede en la Red Cántabra de Desarrollo Rural.
El Pasaporte rupestre tiene vigor en los destinos de arte rupestre de las tres áreas del sudoeste de Europa adheridas al protocolo Territorios unidos por el primer arte y, específicamente, en las regiones de Dordoña (Francia), Cantabria, Asturias, y Castilla y León (España) y la comarca del Vale do Côa (Portugal). No obstante, el programa está abierto y podrá crecer a medida que otras regiones se vayan sumando.
