La Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado (CEAPA) ha reclamado a los partidos políticos, ante las próximas elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo, un pacto educativo, mejorar los menús escolares o una mayor participación de las familias en la toma de decisiones para el control y gestión de los colegios.
Así lo ha reflejado la organización en un informe que recoge las demandas de las familias de la escuela pública de cara a las próximas electores, elaborado para «defender una educación pública gratuita, inclusiva, laica, realmente democrática, participativa y de calidad para todo el alumnado».
En este sentido, la presidenta de CEAPA, María Capellán, ha pedido a los partidos políticos que la educación «no sea un arma arrojadiza entre unos y otros»: «No cambiemos de leyes de educación dependiendo del color del partido que nos gobierne, porque necesitamos una ley educativa estable que respalde y dé seguridad al alumnado y a la comunidad educativa en general».
Para la organización de padres y madres de alumnos, un pacto educativo «debe de ser uno de los objetivos prioritarios de la nueva legislatura, porque es absolutamente necesario establecer las bases para iniciar una profunda renovación del sistema educativo».
Con el objetivo de combatir el «retroceso» que la educación pública «ha sufrido en los últimos años», reclama «todos los recursos necesarios» ya que, a su juicio, incremento de la inversión en educación pública «permitirá mayores recursos en los centros, más profesorado de apoyo, mejores infraestructuras, incremento de los programas y una mejor respuesta educativa».
También considera que las políticas que las administraciones educativas desarrollen «deben tener como objetivo prioritario frenar la privatización del sistema educativo, defendiendo el papel prioritario de la escuela pública y la subsidiariedad de la privada-concertada dentro del sistema educativo, que tienda a la paulatina y efectiva disminución de la concertación educativa y, en ningún caso, a su ampliación».
CEAPA defiende la gratuidad de la enseñanza obligatoria y la prohibición del cobro de cuotas encubiertas, pago de libros y materiales escolares. «Debemos acabar con las prácticas de copago y el hecho de que las AMPA deban cubrir gastos imprescindibles como consecuencia de que, en muchos casos, las administraciones no están transfiriendo dinero suficiente a los centros», asegura.
Ese pacto educativo, según añade, también debería incluir una bajada de ratios para «desmasificar» las aulas, con una ratio máxima de 18 alumnos en Infantil, 20 en Primaria, y 25 en ESO, Bachillerato y ciclos formativos.
Por otro lado, la organización ha recordado que las administraciones educativas «tienen la obligación de fomentar los cauces de participación de madres y padres del alumnado, así como promover su formación para que puedan ejercer su participación y puedan intervenir en el proceso de toma de decisiones para el control y gestión de los centros».
Para ello, destaca que es «necesario» garantizar las ayudas económicas y de todo tipo a las AMPA como principal cauce de participación de las familias en los centros y como interlocutoras sociales en todo lo referente al sistema educativo. Las demandas incluyen también una adaptación de los tiempos escolares y el calendario lectivo a las necesidades reales del alumnado en su proceso educativo, con ampliación de la permanencia del alumnado en sus instalaciones para la realización de actividades extraescolares de carácter voluntario.
Respecto a las competencias curriculares, demanda, entre otras medidas, introducir en el currículo «los valores democráticos, la solidaridad, la coeducación, la inclusión; que se transmita que la diversidad es riqueza y que prevenga el racismo, la xenofobia o el sexismo, así como introducir desde Infantil la educación afectivo-sexual y el buen uso de nuevas tecnologías de forma transversal».
En el ámbito de la evaluación, CEAPA aboga por eliminar las notas numéricas y las calificaciones (Insuficiente, Suficiente, Bien…) en Primaria, volviendo a las fórmulas de ‘Progresa adecuadamente’ y ‘Necesita mejorar’ como elemento favorecedor de la inclusión. Además de limitar la repetición de curso a situaciones excepcionales de carácter madurativo.
PLAN DE EFICIENCIA ENERGÉTICA EN LOS COLEGIOS PÚBLICOS
En cuanto al cambio climático, las familias advierten de que los centros educativos públicos «no están por lo general preparados para garantizar el desarrollo de su actividad cuando las temperaturas registran sus valores máximos o mínimos». Por eso, propone una norma básica a nivel estatal que establezca requisitos de construcción y adecuación de las instalaciones educativas desde parámetros de protección del medio ambiente y eficiencia energética, así como un Plan de Eficiencia Energética en los centros educativos de la red pública en todo el Estado.
Debido a que el 41,3% de niños y niñas padecen obesidad o sobrepeso, según el último Informe Aladino sobre obesidad infantil, CEAPA reclama a las administraciones que «tomen medidas activas para combatir la epidemia de obesidad». Para mejorar la alimentación desde la infancia, aseguran que es «imprescindible» mejorar la calidad de los menús de los comedores escolares, un servicio donde, en su opinión, «lamentablemente, prima la reducción de costes frente a cualquier otro aspecto».
También exige que desaparezcan productos no saludables de las máquinas de vending y las cafeterías de los centros de Secundaria, así como la regulación de la publicidad de alimentos no saludables dirigida a la infancia.