Finalizadas las tareas de rescate de las víctimas del accidente de un autobús que causó siete muertos y dos heridos al despeñarse por un puente de 29 metros sobre el Lérez en Cerdedo-Cotobade (Pontevedra), los trabajos en la zona se centran ahora en la recuperación del vehículo del lecho del río, para lo que será necesario la instalación de una grúa.
El primer paso será la medición de la capacidad de resistencia del puente. Para ello, a partir de las 09.00 horas de este martes está previsto que arranquen las pruebas de carga de la infraestructura.
Esta información servirá de base a los expertos para elegir dónde ubicar la grúa encargada de levantar el autobús y elevarlo hasta el propio puente, ya que la orografía del río en el lugar del accidente, con pronunciadas pendientes a ambos lados del cauce, obliga a realizarlo de esta manera.
El objetivo, según fuentes consultadas por Europa Press del dispositivo instalado en Pedre –Cerdedo-Cotobade (Pontevedra)– tras el siniestro registrado la pasada Nochebuena, es proceder a la retirada del autobús «lo antes posible».
Con todo, el importante caudal que presenta el Lérez en estos momentos después de las lluvias de la última semana podría retrasar esta tarea, si bien las predicciones meteorológicas apuntan a una tregua de las precipitaciones, al menos, hasta la tarde del miércoles.
Así las cosas, se espera que la recuperación del autobús siniestrado pueda arrojar luz sobre las causas del siniestro. Se trata de un vehículo de unos 6 años de antigüedad, con capacidad para 55 pasajeros y que realizaba para la compañía Monbus la línea Lugo-Vigo.
Hasta el momento, según ha confirmado este lunes el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones; todavía no ha sido analizada la información del tacógrafo del autobús, cuyo conductor, uno de los dos supervivientes, ha dado negativo en las pruebas de alcohol y drogas.
En la mañana de este lunes fue recuperado el cuerpo de la última víctima fallecida en el accidente del puente de Pedre, que fue localizado unos cientos de metros río abajo desde el lugar al que se precipitó el autobús tras salirse de la vía y romper el quitamiedos.
Concluida la búsqueda de los desaparecidos, un equipo de los bomberos ha descendido hasta el autobús para realizar tareas de preparación de cara a la retirada del vehículo del río.
Así, los profesionales han cortado árboles y han retirado partes de la carrocería del autobús para aligerar su peso y, asimismo, evitar que el agua se concentre en el interior del habitáculo.
ACCIDENTE EN NOCHEBUENA
El accidente tuvo lugar sobre las 21.20 horas de este sábado, Nochebuena, cuando un autobús de la empresa Monbus, de la línea regular entre Lugo y Vigo, se precipitó al río a la altura del kilómetro 67,5 de la N-541, en la parroquia de Pedre, en un puente a unos 35 metros de altura.
Dos de los fallecidos fueron rescatados la misma noche del suceso, con un fuerte temporal y a través de una ‘línea de vida’, dado que era muy difícil y peligroso llegar al autobús. Otras cuatro víctimas fueron localizadas durante la jornada del domingo y la séptima fallecida, el lunes.
Poco después del accidente, los servicios de emergencia rescataron con vida al conductor del autobús, que fue trasladado al Hospital Clínico de Santiago y ya ha sido dado de alta. El hombre dio negativo en los test de alcoholemia y de drogas. También fue rescatada con vida una mujer, que fue evacuada al Hospital Montecelo de Pontevedra.
Fue un conductor que pasó por la zona poco después del siniestro el que alertó en primer lugar al 112, al ver la barandilla del puente rota. Poco después, emergencias recibía también la llamada de alerta de la pasajera superviviente desde dentro del autobús, poniendo en marcha los medios de rescate.