Las tarjetas monedero ya están asignadas a 65.000 familias en situación de vulnerabilidad, tal y como ha anunciado este lunes el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, tras una visita a la sede de Cruz Roja Española, para participar en el Pleno del Consejo de Protección.
El reparto de estas tarjetas es una competencia de los gobiernos autonómicos que está siendo gestionada en colaboración extraordinaria con Cruz Roja.
«Es un motivo de gran satisfacción que a día de hoy ya hay 65.000 familias en España a las que les ha sido asignada una de estas tarjetas que permiten hacer la compra con total normalidad en el supermercado, acceder a productos frescos de alimentación, también a productos de higiene, algo que no se puede hacer si las familias tienen que ir a una cola para recibir una bolsa con alimentos enlatados», ha explicado Bustinduy, este lunes, en declaraciones a los medios.
Cuando se puso en marcha este programa, el pasado mes de abril, se fijó como objetivo llegar a 70.000 familias durante este primer año de transición a este nuevo sistema que las Comunidades Autónomas tendrán que gestionar ya en solitario durante 2025.
La previsión es que lo hagan a partir del segundo trimestre del nuevo año, ya que las familias podrán seguir usando las tarjetas monedero que han recibido en 2024 hasta el 31 de marzo de 2025, dado que estas tarjetas se cargan de forma trimestral.
De esta manera, y aunque el reparto de las tarjetas finaliza este mes, el día 31 de diciembre, los gobiernos autonómicos tendrán tres meses extra para ultimar la implantación de este programa en sus territorios.
«Estamos ante un cambio de paradigma. Es un cambio de modelo de políticas públicas para la provisión de asistencia material básica. Se trata de dignificar la provisión de esta asistencia y que las familias que están en una situación de vulnerabilidad, bueno, pues que puedan ejercer las actividades cotidianas como hacer la compra con total normalidad, sin ningún estigma», ha insistido el ministro.
El sistema de tarjetas monedero fue aprobado de forma unánime por todos los gobiernos autonómicos en el año 2021 para sustituir al antiguo Programa FEAD y ha arrancado en este año 2024.
Las tarjetas monedero buscan ofrecer una alternativa a aquellas personas en situación de privación material severa que tienen niñas, niños o adolescentes a su cargo, tal y como marca el Fondo Social Europeo Plus (FSE+) que financia estas ayudas y cuyas bases establecen que su dotación se destine a la lucha contra la pobreza infantil de forma preferente, sirviendo de complemento para los otros programas que ofrecen alimentos a personas en situación vulnerable.
El programa ofrece el dinero a estas familias de forma directa a través de tarjetas monedero que se cargan para la compra de alimentos y productos de primera necesidad en los supermercados adheridos al programa (Carrefour, Alcampo, Eroski-Caprabo, Spar Gran Canaria, Más y Más, Alimerka y Dinosol).
LAS FAMILIAS RECIBEN ENTRE 130 Y 220 EUROS AL MES
La cuantía económica que reciben estas familias en sus tarjetas depende del número de miembros que la componen, yendo desde los 130 euros por mes que recibe una unidad familiar compuesta por dos personas, a los 220 euros por mes que se transfieren a una familia formada por más de cuatro miembros.
«Los servicios sociales de cada una de las Comunidades Autónomas, de los ayuntamientos, han derivado a las familias a la Cruz Roja y la Cruz Roja se ha encargado de hacer la gestión por la que se le ha entregado la tarjeta a estas familias y se han efectuado las recargas y, a continuación, en una serie de supermercados con los que se han establecido unos convenios de colaboración, estas familias han podido utilizar las tarjetas como cualquier tarjeta de compra con un sistema de control en caja sobre el tipo de productos que se pueden comprar», ha puntualizado el ministro.
Desde la Dirección General de Diversidad Familiar y Servicios Sociales, integrada en el ministerio que lidera Bustinduy, se constituyó en abril un grupo de cooperación técnica con todas las Comunidades Autónomas y las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla para llevar a cabo un seguimiento del Programa Básico del FSE+, como se llama oficialmente, que es parte del Fondo Social Europeo Plus y que a lo largo de cinco años destina un presupuesto del que este año han dedicado 95 millones de euros.
Desde abril, este grupo ha mantenido cinco reuniones oficiales, y desde el Ministerio de Derechos Sociales y Consumo se ha respondido a 45 consultas a través del buzón de correos de servicios sociales habilitado para este fin, además de decenas de consultas resueltas de manera telefónica y por email.
El ministro ha mostrado su agradecimiento a aquellos gobiernos autonómicos que ya han comprometido «el 100%» del presupuesto asignado a este programa y ha animado al resto de ejecutivos regionales a realizar un esfuerzo para acelerar su despliegue.
Por otro lado, Bustinduy ha querido visitar Cruz Roja para manifestar su «apoyo absoluto» tanto a esta como a otras ONG que han sufrido una campaña «organizada por las fuerzas de ultraderecha y por quienes tienen interés en sembrar la desconfianza entre unos y otros y esa sensación de caos».
Esto lo hacen, según el ministro, con «un único objetivo: desmantelar la sociedad civil organizada atacando a sus organizaciones para poder ocupar ellos a continuación ese espacio». Por ello, frente a esta campaña, Bustinduy ha defendido el «impecable» trabajo que realizan las organizaciones del Tercer Sector.