Laura Escanes no puede más. Las críticas que recibe a través de redes sociales por su ajetreada vida social desde que anunció su separación de Risto Mejide han hecho que la influencer estalle y ponga los puntos sobre las íes a los que cuestionan su faceta de madre por el hecho de compaginar el cuidado de Roma con sus planes de ocio con amigos cuando no está con la pequeña.
Indignada, la catalana ha compartido un mensaje en el que una de sus seguidoras le recrimina que no cuide de su hija y, asegurando que no es la «mosquita muerta» que «aparentaba ser», apunta que «con razón» se ha separado del presentador, de quien por cierto dice que también «puede tener una vida» al igual que la tiene ella.
Una durísima crítica a la que Laura ha respondido con rotundidad, en el que denunciando algunos titulares machistas que ha protagonizado desde que anunció su ruptura con Risto, ha dejado claro lo harta que está de que la gente cuestione su vida sin tener ni idea del tiempo que pasa o deja de pasar con su pequeña:
«Sé que no debería ni contestar a estas cosas pero siento una impotencia increíble. No tengo de dar explicaciones de nada sobre cómo nos estamos organizando como familia, faltaría más. Pero es alucinante los mensajes que recibo» ha escrito, sorprendida por la «normalidad» que se da a que sus seguidores – «mayormente mujeres adultas», como destaca – envíen mensajes con esta «mentalidad machista».
Una mentalidad que, se lamenta, también ve en algunos titulares, citando uno en el que se decía «que Risto hacía de canguro mientras yo me iba de concierto». «DE CANGURO. Por favor» ha añadido índignada.
«Si queréis pensar y decir que me he aprovechado de él, adelante» ha concluido, asegurado que aunque va a «ahorrarse lo que piensa» no entiende por qué «solo me llegan mensajes a mí sobre dónde está mi hija». «¿Por qué la gente no se alarma cuando ve a un padre salir o viajar por trabajo? ¿Por qué me estoy llevando todos los titulares machistas yo?» ha añadido incrédula, ironizando que pese a las críticas va a continuar con su vida social: «Ya os aviso que esta noche tengo un evento y voy a tener que abandonar a mi hija con 20 euros sola para que se vaya a pedir comida».