La vicesecretaria general adjunta de diplomacia de la OTAN, Carmen Romero, ha cargado este miércoles contra Rusia por, a su juicio, haber provocado la crisis con Ucrania y «pisotear» muchos acuerdos internacionales que «ella misma ha suscrito en los últimos 30 años». «Lo que Rusia solamente entiende es el lenguaje de la fuerza».
Así de tajante se ha mostrado Romero este miércoles en una entrevista en ‘Cope’, al ser preguntada por la posición de la OTAN en esta crisis y los próximos pasos de la organización si finalmente Rusia entra en conflicto.
«Lo que está intentando Rusia es rebobinar la historia 30 años y pisotear muchísimos de los acuerdos internacionales que ella misma ha suscrito. Documentos en los que Rusia acepta que la OTAN tiene una política de puertas abiertas y valores democráticos», ha proclamado.
En este punto, Romero ha puesto en valor el trabajo de la OTAN, que está trabajando conjuntamente con la Unión Europea y otras organizaciones, para mantener la paz y evitar un conflicto armado: «Estamos haciendo todo lo posible para que Rusia retorne a la mesa de diálogo y se lo tome en serio».
Según ha explicado la responsable de diplomacia de la OTAN, a finales de esta semana la OTAN enviará las respuestas escritas a las propuestas planteadas por Rusia pese a que muchas de estas son «inaceptables» porque van en contra de los valores de la organización y del Estado de Derecho.
Eso sí, ha dejado claro que los 30 países miembros están interesados en «seguir escuchando a Rusia, seguir escuchando sus preocupaciones e identificar qué es lo que podemos hacer para encontrar avenidas de diálogo».
UN COSTE MUY ELEVADO
En este punto, Romero ha precisado que las tropas de la OTAN no pueden actuar en Ucrania en caso de que se desate un conflicto bélico ya que este país no forma parte de la Alianza Atlántica, si bien ha explicado que la mayor presencia militar desplegada en los países del este por parte de la organización responde al envío de señales a Rusia de que el «coste» de una acción bélica «va a ser inmenso» y para «preservar la paz».
«Lo que estamos intentando hacer pese a que vemos que Rusia se está preparando para un conflicto armado, es todo lo posible para enviar señales a Rusia de que el coste de una acción (de invasión a Ucrania) va a ser elevado», ha alertado.
En palabras de Romero, lo que Rusia solamente entiende es «el lenguaje de la fuerza», por lo que la OTAN se está esforzando en que el país liderado por Putin «vuelva al diálogo y se lo tome en serio».