Los costes económicos mundiales de los crustáceos acuáticos invasores ascienden al menos a 271 millones de dólares –unos 239 millones de euros–, según un estudio realizado por investigadores de España, República Checa, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos, Italia y Francia, que ha contado con participación de la Estación Biológica de Doñana y dado a conocer este lunes.
Según ha explicado en un comunicado el CSIC, aunque en los últimos años se ha prestado mayor atención a la forma en que los crustáceos acuáticos invasores son introducidos en nuevas regiones y a sus repercusiones, los costes monetarios que estas especies invasoras provocan «han pasado en gran medida desapercibidos».
Un equipo internacional de investigación, con miembros de instituciones de España, la República Checa, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos, Italia y Francia, han identificado todos los costes económicos de los crustáceos acuáticos invasores existentes hasta ahora en la literatura científica y han señalado las lagunas de conocimiento existentes hasta la fecha. Según el estudio, publicado recientemente en la revista ‘Science of the Total Environment’, los costes económicos mundiales de los crustáceos acuáticos invasores «ascienden al menos a 271 millones de dólares».
«Eso es como si, por ejemplo, le pidiésemos aproximadamente un euro a cada ciudadano de Alemania, Francia, Italia y España para pagar los daños causados por los crustáceos invasores, y aun así, es una enorme subestimación de los costes reales», ha expuesto el investigador postdoctoral de la Estación Biológica de Doñana (EBD), instituto de Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el doctor Oficialdegui.
LOS MÁS PERJUDICIALES: CANGREJOS DE RÍO Y CANGREJOS MARINOS
Los crustáceos invasores –aquellos introducidos y que se expanden fuera de su área de distribución natural– han sido reconocidos como «una grave amenaza» a los ecosistemas con impactos probados como, por ejemplo, la extinción de otras especies. Entre los crustáceos
invasores más notables, se encuentran los cangrejos de río y los cangrejos marinos, considerados a menudo los más perjudiciales por su tamaño, su papel fundamental en los ecosistemas y su tolerancia a diferentes entornos.
Los costes económicos relacionados con los cangrejos de río se atribuyeron principalmente a una sola especie y país –el cangrejo señal en Suecia, sumando 116,4 millones de dólares, unos 102,6 millones de euros–. Sin embargo, es probable que esto refleje una falta de reportes económicos en otros lugares.
Además, otras especies de cangrejos de río norteamericanos, como el cangrejo rojo o el cangrejo de los canales, causaron costes monetarios, pero en menor medida. La mayoría de los costes relacionados con los cangrejos de río (80%) se atribuyeron a daños o pérdidas de recursos, como la pesca o la agricultura.
Por su parte, los cangrejos marinos causaron costes monetarios sobre todo en América del Norte (57%) y Europa (42%), principalmente como consecuencia de dos especies de cangrejos: el cangrejo verde europeo (86,4 millones de dólares, 76,2 millones de euros) y el cangrejo chino (62,9 millones de dólares, unos 55,4 millones de euros). Estas invasiones afectaron principalmente a las pesquerías y a las administraciones, siendo la gran mayoría, de nuevo, relacionadas con daños y pérdidas de recursos.
ES NECESARIA MÁS INVESTIGACIÓN
«Sorprendentemente, sólo unos pocos costes fueron atribuidos a la gestión –prevención, control, mitigación o erradicación– de estos crustáceos invasores. Una posible causa de la falta de registros en este ámbito podría ser debida a los beneficios –comerciales y recreativos– que proporcionan, contribuyendo a una percepción positiva hacia el valor de estas especies invasoras. Esto, en cierto modo, puede llevar a un reconocimiento limitado de los costes económicos –especialmente los indirectos–, así como a un interés limitado por comprender sus impactos», ha subrayado el profesor asociado de la Universidad de Bohemia del Sur en Ceské Budejovice (República Checa), Dr. Kouba.
En general, los elevados costes de los daños hacen que se necesite «urgentemente» una mayor gestión para prevenir y controlar las invasiones actuales y futuras. «Aunque se ha hecho un gran esfuerzo para recopilar los costes de los crustáceos invasores, las
lagunas de conocimiento en los costes notificados a escala taxonómica –muchos invasores conocidos no tienen costes económicos notificados–, geográfica –Asia, África, Sudamérica u Oceanía están prácticamente ausentes a pesar de la presencia de crustáceos invasores– y temporal –la mayoría de los costes se produjeron en el siglo XXI– sugieren que los costes monetarios notificados aquí están muy subestimados», ha apuntado el investigador postdoctoral del Centro Helmholtz de Investigación Oceánica de Geomar en Kiel, Alemania, Dr. Cuthbert.
Este estudio, ha concluido la nota de prensa, «pone de manifiesto la necesidad de seguir informando de los costes económicos en estos grupos taxonómicos para evaluar mejor la verdadera magnitud de los costes monetarios causados por los crustáceos invasores, ya que muchos costes aún no se han cuantificado ni publicado».