Los estudiantes españoles de quince años están por debajo de la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en conocimientos financieros.
Así lo refleja el Informe PISA 2022 sobre la evaluación de la competencia financiera de los alumnos de quince años publicado este jueves por la OCDE y que ha evaluado en España los conocimientos financieros de más de 2.000 alumnos nacidos en 2006 de un total de 206 centros educativos. La mayor parte del alumnado participante en la evaluación se encontraba cursando 4º de ESO.
En este nuevo informe los estudiantes españoles han obtenido una puntuación media estimada en competencia financiera de 486 puntos, doce puntos por debajo del rendimiento promedio de la OCDE, que se sitúa en 498 puntos.
De los catorce países miembros de la OCDE y los seis asociados que han participado en la evaluación, es Bélgica el que lidera la tabla con 527 puntos, seguido de Dinamarca (521) y Canadá (519). España se sitúa entre Noruega (489) e Italia (484).
No obstante, el estudio destaca que un 25% de los estudiantes españoles se encuentran en los niveles más altos de rendimiento (4 y 5), mientras que un 58% se sitúan en un nivel medio.
Según el informe, España es uno de los países donde menos desigualdad existe en competencia financiera entre el alumnado desfavorecido y el favorecido. Con una diferencia de 73 puntos, esta es 14 puntos menor que el promedio de la OCDE, y significativamente inferior a países como Estados Unidos (92), Bélgica (104) o Países Bajos (97).
El estudio observa también la exposición a la educación financiera que han tenido los alumnos en los 12 meses previos a la realización de la evaluación. En este sentido, los estudiantes españoles se sitúan ligeramente por debajo del promedio de la OCDE, al informar de que habían aprendido y conocían casi 7 de los 16 conceptos financieros que se les presentaban.
Así, los conceptos que habían aprendido más son el sueldo (75%), el presupuesto (70%), el empresario (68%) y el préstamo bancario (66%). Por el contrario, los que menos fueron el interés compuesto (21%), el tipo de cambio (21%), la diversificación (19%), el retorno de la inversión (18%), y la depreciación (9%).
Respecto a la interacción con los padres sobre asuntos relacionados con el dinero, los estudiantes españoles hablan con sus progenitores al menos una vez a la semana sobre aspectos relacionados con el dinero para compras (49%), la paga (39%), sus ahorros (38%), sus gastos (37%) y las compras en línea (36%).
Sobre este último asunto, el 85% de los alumnos españoles realizó alguna compra ‘online’ en los 12 meses anteriores a la evaluación, en línea con el promedio de la OCDE (86%). Un 58% de los estudiantes españoles usó su teléfono móvil para pagar durante el año previo al estudio. La media de la OCDE se situó en el 66%.
Además, menos de la mitad de los estudiantes españoles de quince años (el 47%) declara tener una cuenta en una entidad bancaria, frente al 63% en que se sitúa el promedio de la OCDE.
El porcentaje es todavía menor entre los alumnos de España que informó de que poseía una tarjeta de pago o de débito (un 24%). El promedio de la OCDE es del 62%, con países como Dinamarca, Países Bajos y Noruega superando el 90%.
El informe también indica que el porcentaje de estudiantes a los que les gusta hablar sobre asuntos de dinero en España se sitúa en el 51%, muy similar al promedio de la OCDE, que es del 50%. Sin embargo, un 38% de la población estudiantil española dice que los asuntos de dinero no son importantes para ellos.