Hostelería de España, junto con Hostelería de Madrid y la Asociación Madrileña de empresas de restauración (AMER), han convocado un acto
simbólico de protesta frente al Ministerio de Hacienda el próximo martes a las 10.30 horas, porque no quieren seguir pagando los «platos rotos» de la pandemia.
En concreto, esta protesta se celebrará de forma simultánea en las principales provincias españolas para representar la grave situación que sigue viviendo el sector hostelero.
El sector hostelero, casi un año después del inicio de la pandemia, denuncia que sigue pagando los «platos rotos», debido a la falta de ayudas directas y a la criminalización del sector, sometido a restricciones mucha veces injustificadas y desproporcionadas que sigue
ahogando día a día afectando al empleo y al tejido empresarial.
El secretario general de Hostelería de España, Emilio Gallego, ha lamentado este jueves en un encuentro que bares y restaurantes sean los señalados en esta crisis, por lo que ha avanzado que Hostelería de España pondrá en marcha la próxima semana una nueva campaña, ‘Un año de restricciones pagando los platos rotos’. «Sentimos que se ha focalizado en la hostelería de forma injusta. Las Administraciones no han hecho lo que tenían que haber hecho y ahora lo estamos vemos con las vacunas», ha denunciado.
«Se ha elegido a la hostelería como un sector muy visual, porque no hay calle en España sin bares, para parecer que son muy drásticos y se lucha mucho contra el virus. Somos un chivo expiatorio y ejemplificador de lo que no se ha hecho con otros sectores», ha lamentado.
La hostelería española concluyó 2020 con unas pérdidas de 70.000 millones de euros en la facturación, alrededor del 50% de sus ventas, y con el cierre definitivo de 85.000 bares y restaurantes por el impacto de la crisis sanitaria del coronavirus.
«El sector está en un momento crítico y atravesando su peor momento histórico. Cerramos 2020 con una reducción del 50% de la facturación. Esto es dramático para un colectivo tan fragmentado», ha avanzado Gallego.
En concreto, el sector ha destacado la pérdida de empleos, ya que actualmente hay 360.000 trabajadores se encuentran en situación de ERTE, mientras que calculan que se han perdido 300.000 de manera completa. «Creemos que unos 85.000 establecimientos han cerrado ya definitivamente y lamentablemente todavía no se ha tocado fondo», ha advertido Gallego.