Los principales líderes de la OTAN ha felicitado al Gobierno por el éxito de la cumbre de Madrid, en la que han mostrado un frente unido ante Rusia y han aprobado el nuevo Concepto Estratégico, y se han citado para el próximo año en Vilna, la capital de Lituania, uno de los países sobre los que planea precisamente la amenaza de Moscú.
En las ruedas de prensa que han ofrecido tras dos días de cumbre, todos ellos han coincidido en reconocer la buena organización de la cita, en la que también se ha dado luz verde para que Suecia y Finlandia se conviertan en miembro de la Alianza.
Para el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, la cumbre ha sido «perfecta». Así, ha aplaudido la «impecable» organización española y ha expresado su agradecimiento al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en nombre de todos los países aliados.
En su opinión, la cita ha demostrado que España es «un aliado muy valioso» dentro del bloque euroatlántico, que ha incluido por primera vez el flanco sur entre los frentes a tener en cuenta de cara a potenciales desafíos, tal y como deseaba el Gobierno.
«Creo que han hecho un trabajo increíble», ha comentado por su parte el primer ministro británico, Boris Johnson, para quien si algo ha demostrado esta cumbre es que la OTAN «goza de buena salud y se fortalece con nuevos miembros y un nuevo propósito».
Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, ha agradecido la «perfecta organización» y en particular la apuesta de Sánchez por celebrar una cena euroatlántica por primera vez, que reunió en torno a la mesa a los miembros de la OTAN y los seis miembros de la UE que no forman parte de la Alianza, incluidos por ahora Finlandia y Suecia.
España ha celebrado esta cumbre «40 años después de su entrada en la OTAN y tras la restauración de su democracia», ha resaltado, subrayando que actualmente «la democracia se está viendo contestada en todo el mundo por regímenes autoritarios» y que es «una conquista frágil» por la que «nunca hay que abandonar la lucha».
El presidente estadounidense, Joe Biden, ha resaltado que esta ha sido «una cumbre histórica», mientras que el canciller alemán, Olaf Scholz, ha celebrado que por primera vez hayan participado los socios del Indo-Pacífico (Australia, Nueva Zelanda, Japón y Corea del Sur) y dado las gracias al presidente del Gobierno. «España es un aliado importante», ha destacado.
Además de a Sánchez, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, que tras la cumbre se ha reunido con el presidente del Gobierno en Moncloa, ha querido agradecer al pueblo español haber acogido la cita.
Fuentes del Gobierno han explicado que los líderes han bromeado durante estos dos días con el hecho de que las cumbre aliadas en Madrid son sinónimo de ampliación y fortalecimiento, ya que tras la anterior celebrada en 1997 se inició la ampliación hacia los países del este de Europa y en esta se ha acordado la entrada de Finlandia y Suecia.
Así las cosas, los líderes aliados han acordado que Vilna acoja la cumbre del próximo año, en una clara señal de apoyo a los países bálticos sobre los que planea especialmente la amenaza de Rusia y que han visto reforzar en los últimos meses la presencia de efectivos de la OTAN en su territorio.