Mucho se ha hablado de la entrevista que concedieron Meghan Markle y el príncipe Harry a la presentadora de televisión Oprah Winfrey, en la que no sólo revelan lo que vivió la actriz al entrar a la realeza británica sino cómo todos esos meses el príncipe Harry recordó a su madre, Lady Di, en cuanto a la presión de la prensa y paparazzis. Sin embargo, a pesar de tocar esos temas bastante incómodos para todos los involucrados, la pareja dio a conocer una importante noticia.
Dicen que detrás de cada historia hay dos versiones, y Meghan Markle y el príncipe Harry finalmente presentaron su verdad detrás de su renuncia a la familia real británica durante una entrevista realizada por Oprah Winfrey, y emitida ayer por la noche por la cadena ‘CBS’.
En el encuentro, Markle relató que fue tanta la presión y críticas que vivió al adentrarse a este mundo, que incluso desarrolló pensamientos suicidas.
“Simplemente no quería seguir viva. Y ese era un pensamiento muy real, claro, aterrador y constante”, confesó la actriz.
Otro de los puntos escabrosos que se tocaron fue la preocupación de la familia real por el color de la piel de su primogénito, Archie, a quien nunca se le dio el título de príncipe a pesar de ser descendiente de Harry y séptimo en la línea de sucesión al trono británico.
“Nunca me sentí tan sola. En los últimos meses de mi embarazo me dijeron que nuestro hijo no iba a recibir seguridad. Como no le iban a dar el título de príncipe, no le daban seguridad. Pero nosotros no habíamos creado esa monstruosa maquinaria a nuestro alrededor: él necesitaba estar seguro», apuntó Markle. “El primer miembro de la familia real de color no recibió un título. Y se dijo que fue nuestra decisión, pero no lo fue”, declaró.
Contrario a lo que se pensaba y se había publicado en la prensa británica, Meghan aseguró que Kate Middleton fue quien la había hecho llorar, y no al revés.
Sin embargo, no quiso entrar en detalles porque no quería arruinar la reputación de la Duquesa de Cambridge, además de que, después del encuentro, la esposa de William se disculpó llevándole flores.
Durante las dos horas de entrevista, la Duquesa de Sussex relató que, si bien en un inicio todos la recibieron con una cálida bienvenida, incluida la Reina Isabel II, su vida en el palacio no fue el cuento de hadas que imaginó y debido a todas estas restricciones, tanto ella como Harry supieron que debían alejarse por el bien de su familia.
Sobre si teme que estas declaraciones repercutan en un futuro, expresó: “No viviré una vida centrada en el miedo”.
Por su parte, Harry de Inglaterra compartió lo felices que han sido desde que tomaron la decisión de alejarse de sus deberes reales en enero del año pasado, asegurando que no deseaba un destino como el de su madre, la princesa Diana, y estar atrapado como otros miembros de su familia.
El Duque aclaró que no desea estar en malos términos con ninguno de sus familiares y espera que el tiempo haga que las cosas se arreglen.
Tomados de la mano y a la espera de su segundo bebé, el cual anunciaron que será una niña que nacerá este verano, la pareja ansía seguir construyendo una vida normal, tras una decisión que, aseguran, significó un nuevo comienzo para ellos.
“Mi único remordimiento es haber creído que estaría a salvo con ellos (familia real)”.
Hace apenas unas semanas se supo que los duques de Sussex estaban en la espera de segundo hijo, pero nadie contaba con que dijeran de una vez el sexo del pequeñito que viene en camino. Sin embargo, esto no fue una sorpresa sólo para Oprah sino también para los múltiples seguidores de la familia. “Meghan nos dijo que quería esperar hasta que estuvieras aquí para decirnos si será niño o niña”, dijo la presentadora. Precisamente fue Harry el que lo afirmó sin titubear: “¡Es una niña!”.
El futuro padre de la pequeñita dijo sentirse pleno, agradecido y que su esposa, junto al pequeño Archie y sus tres perros, forman un gran equipo. En cuanto a seguir teniendo hijos, ambos dijeron que no creen que eso suceda y que se sienten bien teniendo a la parejita. La próxima integrante de la familia llegará para el verano.