Más de seis millones de niños y adolescentes en España son atendidos en centros de salud y hospitales por especialistas pediátricos que no están reconocidos formalmente, según ha denunciado la Asociación Española de Pediatría (AEP), compuesta por 24 sociedades de especialidades pediátricas y 14 sociedades regionales de pediatría.
A través de un manifiesto, publicado con motivo del Día de la Pediatría (el Día P), la AEP ha defendido impulsar el reconocimiento del modelo pediátrico español y de las 19 especialidades pediátricas, ya que todavía no están reconocidas oficialmente.
«Es la vía para garantizar la calidad en los cuidados de salud de la población infantil y adolescente. Sin especialistas pediátricos, el futuro de nuestros niños y niñas será menos saludable», ha apuntado en rueda de prensa este lunes el presidente de la AEP, el doctor Luis Carlos Blesa Baviera.
A pesar de los «avances» de los últimos años, Blesa Baviera ha denunciado que «más de seis millones de niños y adolescentes menores de 14 años en España, un 13 por ciento de la población del país, tienen sin ‘reconocer’ a los especialistas que los atienden».
En su manifiesto, los pediatras plantean cinco demandas a la Administración sanitaria. En primer lugar, reclaman acreditar las áreas de capacitación específica pediátricas como «paso imprescindible» para «asegurar la calidad en la formación de los pediatras, poder seleccionar a los profesionales mejor preparados y garantizar una prestación sanitaria equitativa en todo el territorio español».
También apuestan por un itinerario formativo específico para el pediatra de Atención Primaria, con su reconocimiento correspondiente, que le otorgue «el papel y la función que su cometido merece dentro del programa formativo MIR en Pediatría». Junto con esto, piden medidas para atraer profesionales de la pediatría a los centros de AP.
Otro de los puntos que reclaman es trabajar de forma colaborativa en un mapa geográfico donde se estimen las distintas necesidades de especialistas pediátricos con relación a la población pediátrica para planificar las necesidades futuras de recursos humanos especializados en Áreas de Capacitación Específicas (ACE) pediátricas en España.
Por último, reivindican el reconocimiento de las ACE de Pediatría para que los pediatras «puedan trabajar en igualdad de condiciones respecto a sus colegas europeos y en paridad de condiciones en las diferentes comunidades autónomas españolas».
La vicepresidenta de Atención Hospitalaria de la AEP, la doctora María del Mar Rodríguez, ha denunciado que el hecho de que no exista un reconocimiento oficial «implica que no existen requisitos mínimos de formación ni acreditación, ni se dispone de un plan formativo oficial».
«Esta situación no sólo puede repercutir en la calidad asistencial si no que limita el aprendizaje homogéneo de los pediatras y dificulta su formación y actualización adecuada», ha apostillado la experta.
El «deterioro progresivo» de la situación de la pediatría de Atención Primaria es otro de los puntos de las reivindicaciones del colectivo. «Al ser una rama integral y holística en la concepción del niño y adolescente, podría parecer que no precisa de la especialización. En el adulto esta función está a través de la especialidad de medicina de familia, pero no así para el niño y adolescente, pues no está contemplado ningún itinerario específico para la figura del pediatra de atención primaria», ha incidido la doctora Rodríguez.
Igualmente, durante la rueda de prensa las expertos de la AEP han advertido de que esta situación de falta de reconocimiento de los pediatras se agrava debido a la falta de profesionales en las consultas de los centros de salud, muchas de las cuales no cuentan con pediatras.
En este sentido, la AEP ha recordado que se calcula que hasta un 30 por ciento de los niños es atendido por profesionales que no son pediatras. «Esto propicia que los pediatras en activo estén sometidos a un sobreesfuerzo, el que condiciona tener que atender a más niños en el mismo tiempo, con el consiguiente riesgo de cometer errores y afectar a la seguridad del paciente», recoge su manifiesto.
La presidenta de la Sociedad Catalana de Pediatría (SCP), Anna Gatell, ha lamentado que, por ejemplo, en Cataluña el 30 por ciento de las plazas de pediatría de Atención Primaria, otra especialidad que tampoco está reconocida formalmente, están ocupadas por médicos que no son pediatras. Asimismo, solo el 20 por ciento de los residentes de pediatría se van a la AP porque no la encuentran una especialidad atractiva.
«Hay estudios que ponen en evidencia que la mortalidad es inferior cuando los niños son atendidos en Atención Primaria por pediatras. Si en el adulto existe la especialidad de Medicina de Familia, ¿por qué no se reconoce un itinerario específico para la figura del pediatra de Atención Primaria?», ha alertado la doctora.
Gatell ha añadido que esta situación, junto con las jubilaciones próximas de los pediatras en AP, «va a provocar un problema muy grave para dar continuidad a la atención que debemos dar a los niños».
Por otra parte, la presidenta de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP), Ana Martínez-Cañavate Burgos, ha criticado que solo hay en España 62 unidades de alergología pediátrica (teniendo en cuenta centros públicos y privados), una cifra que resulta «insuficiente» ya que uno de cada cuatro niños tiene algún tipo de alergia.
«Desde la SEICAP reivindicamos que los niños con alergia sean tratados por pediatras alergólogos. En primer lugar, porque disponemos de una formación integral para atención de los niños; la ruta formativa para especialistas en alergia pediátrica está establecida y tiene un programa muy completo que cumple con los estándares europeos», ha esgrimido.
En el mismo sentido, ha reivindicado segundo que los niños sean atendidos por personal «especialmente adiestrado para ello, en lugares y espacios exclusivos para la asistencia pediátrica; tanto las salas de espera como las consultas en pediatría son entornos mucho más amables que las de los adultos».
«Además, no podemos olvidar que los pediatras no solo atendemos los aspectos relativos a nuestra especialidad, sino que vemos al niño de forma integral y conocemos sus necesidades y características clínicas. Por eso es tan importante reivindicar el reconocimiento de las ACE; que los niños y adolescentes sean tratados por especialistas pediátricos debería ser un derecho fundamental», ha remachado la presidenta de la SEICAP.
La AEP ha aprovechado esta semana conmemorativa para recabar adhesiones a sus demandas a través de una iniciativa en la plataforma Change.org. La campaña ‘Sin especialistas pediátricos no hay salud infantil’, que se inicia esta semana, pretende recabar firmas de especialistas en salud infantil, otros profesionales sanitarios y de ciudadanos en favor del reconocimiento de las especialidades pediátricas.