El presidente de Renfe, Isaías Táboas, y la presidenta de Adif, María Luisa Domínguez, viajarán este viernes a Mérida para reunirse con la junta de Extremadura y atener a los medios de comunicación tras los continuos incidentes que se están produciendo en el nuevo servicio que une la capital con la región.
Este mismo viernes, según fuentes de la operadora consultadas por Europa Press, el tren Alvia ha registrado otro retraso de treinta minutos por un problema puntual en el tren y una avería en la infraestructura.
Esta incidencia se suma a la del miércoles de más de una hora de retraso, a la del jueves de 70 minutos y a la del día del estreno comercial, que en su primer tramo entre Badajoz y Mérida ya acumuló un retraso demás de 15 minutos.
El miércoles, Renfe destituyó al gerente de Producción de Servicios Comerciales de la línea Madrid-Extremadura tras estos problemas en el Alvia, que también se dieron en el tren Intercity que une la capital con la comunidad extremeña.
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, departamento del que dependen estas dos empresas públicas, Raquel Sánchez, pidió ayer disculpas y se reunió con sus máximos directivos para intentar dar una solución a este problema.
«Cabe decir que son normales determinadas incidencias en los primeros días de una puesta en servicio, pero entiendo que esta situación no es admisible y trabajamos para revertirla lo antes posible. El servicio que se está ofreciendo no es ni el esperado, ni el que los usuarios y usuarias merecen», dijo Sánchez.
