Durante los primeros cinco meses del 2020 se produjeron en España 231.014 defunciones, 43.537 más que en el mismo periodo del año anterior, lo que supone un incremento del 23,2%; de estas muertes, cabe destacar los fallecimientos por enfermedades infecciosas que aumentaron un 1.687,7% respecto a los cinco primeros meses de 2019, correspondiendo el 67,5% de las defunciones a pacientes con COVID-19 identificado y el 26,9% a pacientes sospechosos con COVID-19.
Estos datos se desprenden del avance publicado por el INE este jueves, con carácter provisional hasta que se difundan los definitivos durante el año 2021. Por el momento, se observa una variación del número de fallecimientos con distinta tendencia en los meses de enero y febrero y en los de marzo a mayo. Así, el número de defunciones descendió un 4,3% durante enero y febrero respecto al mismo periodo de 2019 (con 3.568 menos), mientras que en el periodo de marzo a mayo de 2020 el número de fallecimientos se incrementó
un 44,8%, con 47.105 más.
Por meses, y defunciones totales, tomando como comparación cada mes con el del año anterior, en enero se produjeron 1.934 muertes menos que en 2019 (44.615 fallecimientos en 2019 frente a 42.681 de 2020); febrero se contabilizan 1.643 muertes menos (37.737 muertes frente a 36.103); marzo sufre el primer incremento y se contabiliza hasta 20.473 muertes más (de 37.058 el pasado año a 57.531 este); en abril el incremento es de 26.103 muertos (de 34.201 muertos en 2019 a 60.304 en 2020), finalmente, mayo contabiliza la menor subida con 529 muertos más (33.866 frente a 34.395).
Por sexo, fallecieron 115.541 hombres (un 21,9% más) y 115.473 mujeres (un 24,6% más). Por causas de muerte, la mayoría de las defunciones se debieron a causas naturales – el 97,5% del total, 225.164 personas-, y supone un 24,4% mayor que la del mismo periodo del año anterior. Este incremento fue más acentuado en los meses de marzo a mayo (47,2%) con el comienzo de la pandemia, meses antes no consta ningún caso identificado.
Por otro lado, las causas externas se redujeron un 10,7% en los cinco primeros meses del año, descenso que alcanzó el 17,8% durante los meses de marzo a mayo. Se reducen todas las causas, un 8,8% menos la primera causa que es el suicidio, un 1,9 las caídas accidentales y el ahogamiento un 9,6% menos y un 41% los accidentes de tráfico.
En cuanto a las causas naturales, el 23,0% de las defunciones en los cinco primeros meses de 2020 fue por enfermedades del sistema circulatorio. Esta cifra es la primera causa de muerte y tiene una tasa de 112,2 fallecidos por cada 100.000 habitantes. En segundo lugar se encuentran las defunciones por enfermedades infecciosas, donde se incluye las muertes provocados por pandemia y los casos sospechosos, que de marzo a mayo crecieron un 3.000 por ciento.
En tercer lugar se encuentran las muertes por tumores, que fueron 47.222, lo que supone el 20,4 por ciento del total; le sigue las enfermedades del sistema respiratorio con 23.171, siendo el 10 por ciento del total; las muertes por enfermedades del sistema nervioso y de los órganos de los sentidos con 12.392 (5,4%).
A nivel más detallado, la COVID-19, del grupo de enfermedades infecciosas, fue la causa de muerte más frecuente en los cinco primeros meses de 2020. En el caso de COVID-19 virus identificado fallecieron 32.652 personas (con una tasa de 68,8 por cada 100.000 habitantes) y en el de COVID-19 sospechoso murieron 13.032 personas (con una tasa de 27,5).
ENFERMEDADES NO COVID
Por detrás de las muertes relacionadas con la pandemia, entre las enfermedades más frecuentes, las causas de muerte que más aumentaron respecto a los cinco primeros meses de 2019 fueron la diabetes (18,6%), las enfermedades hipertensivas (17,6%) y el Alzheimer (13,7%). Estos incrementos fueron más acentuados durante los meses de marzo a mayo (del 39,5%, 37,1% y 27,3%, respectivamente).
El INE destaca que durante enero y febrero de 2020 el número de fallecimientos debidos a enfermedades del sistema circulatorio y a enfermedades del sistema respiratorio descendieron un 5,1% y un 11,9%, respectivamente. Por el contrario, los tumores aumentaron un 2,0%.
Por su parte, durante el periodo de marzo a mayo de 2020 las defunciones por enfermedades del sistema circulatorio aumentaron un 4,0%, mientras que las ocasionadas por tumores y enfermedades del sistema respiratorio descendieron un 0,6% y un 1,2%, respectivamente Por sexo, los tumores fueron la primera causa de muerte en los hombres (con una tasa de 121,7 fallecidos por cada 100.000 hombres), seguida de las enfermedades infecciosas (tasa de 106,3) y las enfermedades del sistema circulatorio (tasa de 105,3).
Además, las enfermedades del sistema circulatorio fueron la primera causa de mortalidad femenina (118,8 muertes por cada 100.000 mujeres), seguida de las enfermedades infecciosas (tasa de 97,9) y los tumores (tasa de 78,3).
MORTALIDAD POR COVID-19
Concretamente, durante los meses de enero y febrero no se certificó ninguna muerte por COVID-19. Entre los meses de enero y mayo de 2020 fallecieron 32.652 fallecimientos cuya causa de muerte fue COVID-19 virus identificado. Y otras 13.032 personas murieron con sospecha de COVID-19 por tener síntomas compatibles con la enfermedad pero COVID-19 virus no identificado.
Por sexo, fallecieron 17.688 hombres y con COVID-19 sospechoso 5.682, y 14.964 mujeres por COVID-19 virus identificado y 7.350 por COVID-19 sospechoso. Por edades, se concentraron en edades avanzadas. El 87,1% de los fallecidos por COVID-19 virus identificado tenía 70 o más años y el 89,2% de COVID-19 sospechoso tenía 75 o más.
Además, los médicos han certificado en 4.218 casos que la causa de muerte no ha sido directamente la COVID-19, sino que su muerte ha sido debida principalmente a otras causas, pero que la COVID-19 ha contribuido al fallecimiento de dichas personas, como comorbilidad. En 1.655 casos los facultativos lo habían identificado y en 2.563 casos no lo habían identificado pero sospechaban de su presencia por tener síntomas compatibles con la enfermedad.
El mes con mayor número de defunciones por esta causa fue abril con 18.178 fallecimientos por COVID-19 virus identificado y 8.127 por COVID-19 sospechoso (30,1% y 13,5% del total de ese mes, respectivamente). De forma más detallada, la semana con mayor número de defunciones por COVID-19 fue la 14 (del 30 de marzo al 5 de abril), con 6.687 personas fallecidas por COVID-19 virus identificado y 3.977 por COVID-19 sospechoso (32,2% y 19,2%, respectivamente, del total en esa semana).
Durante los meses de enero a mayo de 2020 fallecieron 122.310 personas en centros hospitalarios, 57.135 en sus domicilios particulares y 42.918 en residencias socio-sanitarias. Las defunciones por COVID-19 virus identificado se produjeron, principalmente, en centros hospitalarios (76,4% del total). Por su parte, el mayor número de fallecimientos por COVID-19 sospechoso se dio en residencias socio-sanitarias (55,6% del total).
En cuanto a las complicaciones y comorbilidades más frecuentes en muertes por COVID-19, se informaron 3,8 enfermedades de media en cada certificado. En los fallecidos por COVID-19 la insuficiencia respiratoria y la neumonía fueron las complicaciones más frecuentes informadas en los certificados de defunción. Mientras, la principal comorbilidad fue la enfermedad hipertensiva, seguido de insuficiencia renal y demencia.
Las tasas brutas más elevadas de fallecidos por COVID-19 virus identificado por cada 100.000 habitantes correspondieron a Castilla-La Mancha (160,8), Madrid (150,6) y Castilla y León (125,1). Por su parte, las menores tasas brutas de fallecimientos por esta causa se dieron en las ciudades autónomas de Melilla (2,3) y Ceuta (6,0), y en Canarias (7,5).