El seleccionador nacional de fútbol, Luis Enrique Martínez, afirmó que la selección de Kosovo, rival este miércoles (20:45 horas) en la sexta jornada de la fase de clasificación para el Mundial de Qatar 2022, que se disputa en el Estadio Fadil Vokrri de Prístina, es un equipo que les va a «complicar la vida».
«Hay que intentar, como siempre, abstraerse de todo lo externo y tratar de controlar lo que puedes controlar. Es muy difícil ganar partidos y es diferente jugar con presión y sin presión. Solo hay una manera de presionar y es ganando el partido mañana. Es uno de los partidos más difíciles del grupo. Ojalá me equivoque», dijo en rueda de prensa.
En este sentido, Luis Enrique exhibió sus razones por las que prevé un encuentro complicado en Prístina. «Cuando un equipo no se encierra atrás y presiona alto, no comete errores y no estás muy fino saliendo de presión alta y recuperan el balón cerca de portería te crea problemas. Tiene mucho menos puntos de los que merecen. Es un equipo que te va a complicar la vida, seguro», subrayó.
Por otro lado, dijo que con el lateral del FC Barcelona Jordi Alba y el resto de jugadores con alguna molestia no va a arriesgar en el encuentro contra los kosovares. «Si fuera una final un entrenador se la puede jugar. Aquí riesgos cero», sentenció.
El técnico asturiano destacó el nivel del centrocampista del Valencia Carlos Soler, quien no había debutado hasta este septiembre con ‘la Roja’, pero que acumula «experiencia y bagaje» en la Liga española y es el que asume las jugadas de estrategia y penaltis en su equipo.
«En esa posición tenemos mucho nivel y muchas posibilidades. A este nivel tiene espacio dentro de la selección. Es interesante para el equipo que las puertas están abiertas para los que tienen este nivel. Yo encantado», comentó.
Asimismo, dijo que por encima de la diferencia de goles el objetivo es «ganar el partido». «Y después hay componentes como aprovechar esas situaciones. Como siempre lo que nos rodea es lo negativo porque es más fácil destacar el lío que las virtudes, pero al final todavía dependemos de nosotros mismos para clasificarnos para el Mundial», señaló.
Aún así el seleccionador nacional admitió que «no es el camino más fácil» si llegan a la repesca. «Si ganamos los dos partidos en la repesca dependemos de nosotros, no de esperar a otra cosa. Sí para clasificarnos en noviembre. Es cierto que no estamos en la una situación de poderío. Y nada más. Hay que ir pensando que cosas puedo mejorar», añadió.
Asimismo, recalcó la polivalencia de Marcos Llorente. «Somos un equipo eminentemente ofensivo y a Marcos le damos libertad en situaciones de ataque. Tiene más posibilidades cuando está de interior. Creo que todavía no hemos visto la mejor versión de Marcos porque se necesita un tiempo para soltarse, pero entrenando podemos apreciar todas las posibilidades de cara al gol porque tiene posibilidad de ruptura y buenos centros. A veces tendrá que estar más atrás, quiere jugar y en su caso esa versatilidad le favorece», señaló.