El nuevo técnico del Villarreal, Marcelino García Toral, indicó este martes que espera «responder a las expectativas» y la «confianza» que ha vuelto a depositar en él un club al que ya entrenó durante cuatro temporadas en una primera etapa, aunque es consciente de que el reto que tiene por delante «no es fácil», ya que es preferible «iniciar un proyecto a principio de temporada».
«Es un placer volver a estar aquí y espero responder a las expectativas y la confianza que se nos ha vuelto a mostrar. El reto no es fácil, ya que un entrenador siempre prefiere iniciar un proyecto a principio de temporada que no el transcurso de la misma, pero esto es fútbol y ahora mismo pues tenemos que revertir una situación que no es fácil», comentó el asturiano durante su presentación en el Estadio de la Cerámica.
Marcelino, que ha afirmado un contrato por lo que resta de temporada y dos años más, se mostró «absolutamente convencido» de que con «su apoyo y el trabajo, la profesionalidad y la capacidad de los futbolistas» intentarán llevar al Villarreal al lugar que «corresponde». «Soy consciente del trato recibido aquí en mi etapa anterior del cariño que me demostró la afición todos, y por supuesto, a la vez digo vengo con la misma humildad que en mi anterior etapa», añadió.
El asturiano, que ya entrenó al Villarreal entre 2012 y 2016, insistió en la «responsabilidad» de los técnicos, aunque recordó que esta también la tienen los jugadores, que deben cambiar esa «dinámica de juego y de resultados». «Nosotros somos una herramienta de ayuda, nos volcaremos en eso, y luego pensaremos entrenamiento a entrenamiento y partido a partido no más allá. Hay que ganar partidos», apuntó.
«Primero hay ser conscientes de la situación en la que estamos, y a partir de aquí, responsabilidad y trabajo. Creo que es bastante sencillo de decir y luego también pienso que es el momento de hablar lo justo y trabajar mucho», aclaró.
Para ello, García Toral recalcó que el equipo presenta una «buena» plantilla en la que cree. «Si no fuera así, no estaría hablando aquí. Desde nuestra creencia en sus posibilidades pues intentaremos otorgarle o ayudar a que consigan el rendimiento y regularidad que cualquier equipo de fútbol tiene que lograr para conseguir objetivos altos», dijo, antes de avanzar que prefiere fijar los objetivos «inmediatos y no a largo plazo» porque así lo «requiere» la actual situación.
En el Villarreal, Marcelino se reencontrará con Parejo, un jugador al que entrenó en el Valencia, ahora sin el protagonismo esperado. «El nivel que demuestra cada futbolista es por él, no es porque el entrenador sea capaz de sacarle el mejor rendimiento. Puedo indicarle un camino, darle consejos. Parejo sabe que va a tener nuestro apoyo y también nuestra exigencia, igual que el resto», agregó.
«Ahora mismo hay que optimizar el rendimiento de cada uno de los jugadores y luego, según vaya pasando el tiempo, veremos aquello que podemos complementar o no», zanjó, antes de explicar que su llegada responde a que en la entidad conocen su «dedicación, trabajo y honestidad». «Me resulta emocionante volver porque tuvimos una muy buena relación y creo que eso es lo que en definitiva agranda a las personas. Aquellos casi cuatro años fueron extraordinarios», concluyó.