María Pombo y Pablo Castellano han abandonado ya el Hospital Universitario Quirónsalud de Madrid, en Pozuelo de Alarcón, después de dar la bienvenida a su hija Vega el pasado 19 de junio. Un momento de lo más especial, pero también «el imprevisto más feliz de nuestra vida» según confesaron ellos en redes sociales cuando anunciaron la buena nueva.
Esta tarde, sobre las 16h el matrimonio ha abandonando el hospital después de que Pablo explicara en redes sociales que «fue un parto un poco complicado y aunque están las dos bien, Meri se está recuperando de la cesárea y algún efecto secundario de la medicación».
Además, Lucía Pombo nos confesaba este miércoles que su hermana se encontraba «un poco fastidiada, la verdad» porque «habiendo tenido un parto natural, una cesárea no esperada… no le ha sentado bien la medicación, no duerme por la niña… pero bueno bien».
MARÍA POMBO: «VEGA ESTÁ SÚPER BIEN, YO REGULAR»
María abandonaba el hospital cogiendo a su hija en brazos y nos aseguraba que la bebé «está súper bien, fenomenal con nosotros en el cuarto» y en cuanto a ella, confesaba que «estoy regular, me voy a ir a casa a descansar y a recuperarme, que es lo importante».
Y es que ayer mismo, Lucía nos explicaba que su hermana había tenido algunas complicaciones en el parto ya que no se esperaba que fuese a ser por cesárea y además, le sentaron mal algunos medicamentos. Por este motivo, la pareja no ha abandonado hasta hoy el hospital y ahora ya, descansarán en casa.
PABLO CASTELLANO NOS ASEGURA QUE AMBOS ESTÁN «MUY CONTENTOS»
«Yo muy bien, muy contento» nos decía Pablo en la puerta del hospital, mientras que se deshacía en elogios hablando de Vega: «Mi princesa, ahora que le cuida Martín». «Estamos contentos porque está muy bien y Meri se está recuperando bien y ahora a descansar» concluía el arquitecto, que se mostraba muy pendiente de su mujer y de su hija recién nacida.