Al menos 102 inmigrantes, 40 de ellos menores de edad, han conseguido entrar irregularmente en Ceuta durante este viernes y la primera mitad de este sábado arriesgando sus vidas para aprovechar el paso de la borrasca Karlotta por la ciudad autónoma y la reducción de la vigilancia costera de las Fuerzas de Seguridad marroquíes por las adversas condiciones meteorológicas.
La inmensa mayoría ha logrado acceder a la localidad española norteafricana a nado bordeando el espigón fronterizo del Tarajal, aunque también se han registrado intentos de cruce del vallado terrestre. En uno de ellos la Guardia Civil ha tenido que requerir el apoyo del Cuerpo de Bomberos para sacar a un varón de origen subsahariano de una zona rocosa en la que corría «un riesgo real e inminente de ser aplastado».
Fuentes policiales han detallado en declaraciones a Europa Press que casi todos los recién llegados son ciudadanos marroquíes, aunque también se ha registrado la entrada de personas nacionales de países del África subsahariana como Chad, Sudán o Guinea Conakry y de un yemení.
Cuarenta de los más de cien inmigrantes a los que ha atendido el Equipo de Respuesta Inmediata ante Emergencias (ERIE) de Inmigración de la Cruz Roja de Ceuta son menores de edad que han sido acogidos en el centro de La Esperanza que gestiona el Servicio de Protección a la Infancia de la administración local.
Con ellos el número de menores extranjeros no acompañados que alberga la Ciudad Autónoma se sitúa ya en 230, cien por encima del máximo establecido en 2022 como límite para declarar una contingencia migratoria que permita activar el protocolo de derivación de niños migrantes solos a otras regiones de la península.
El Área de Menores del Gobierno de Ceuta remitió el pasado lunes al Ministerio de Infancia una memoria solicitando el traslado de 78 y durante la próxima semana se prevé que lleguen a Andalucía los 19 adolescentes que falta por llevar al otro lado del Estrecho en el marco del acuerdo alcanzado a finales de 2023 por la Junta con la Ciudad para el desplazamiento de 36.
El Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) local que gestiona la Administración General del Estado alberga actualmente a alrededor de 300 personas, la mayoría de origen subsahariano (170) y argelinos (68). Su índice de ocupación está en un 60% de su capacidad máxima operativa, cifrada en algo más de 500 plazas tras su última ampliación.