Medio centenar de organizaciones han lanzado este lunes la campaña anual ‘Por una Escuela Pública y Laica. Religión fuera de la Escuela’ en la que reclaman que la religión se practique en el ámbito privado fuera de los colegios financiados con dinero público.
Estas organizaciones demandan al Gobierno y a los grupos políticos, especialmente a los que han apoyado la investidura, compromisos para salvaguardar principios constitucionales basados en los Derechos de la Infancia más elementales, «como es preservar la libertad de conciencia y la no segregación por motivos ideológicos y sociales en el ámbito escolar».
Para ello, piden que se comprometan «a sacar la religión del sistema educativo, lo cual requiere de actuaciones políticas y medidas legislativas».
De este modo, la campaña insta al Gobierno a garantizar el «imprescindible» carácter laico que, a su juicio, «debe revestir la escuela como institución pública, dejando la religión confesional fuera del sistema educativo oficial, es decir, del currículo y del ámbito escolar».
La iniciativa también exige la derogación de los acuerdos de España con la Santa Sede, así como los suscritos en el mismo sentido con otras confesiones religiosas, «obligando al Gobierno a proceder para el cumplimiento de ese mandato».
Para garantizar la plena laicidad de la enseñanza, las organizaciones que forman parte de esta campaña, que se renueva anualmente desde hace más de 20 años, defienden sacar la enseñanza confesional de las religiones del currículo, horario y ámbito escolar «de forma inmediata»; no financiar con dinero público «el adoctrinamiento religioso en ningún centro escolar»; y potenciar la red pública de enseñanza «como fundamental para vertebrar el derecho a la Educación de todos, evitando -de forma progresiva- la desviación de fondos públicos hacia intereses privados de todo tipo».
El coordinador de la campaña, Sergio López, ha explicado que diseñarán un vídeo conjunto que publicarán en las redes sociales e intentarán concentrar su difusión en las semanas previas a la matriculación del alumnado.
«Estamos intentando recopilar material para difundir en el momento de la matriculación para que las familias matriculen a sus hijos en centros públicos y no les matriculen en la asignatura de Religión», ha señalado López.
MATRICULAR A LOS HIJOS EN COLEGIOS PÚBLICOS Y LAICOS
Desde Comisiones Obreras, Aída San Millán considera que es «muy importante» solicitar a las familias que matriculen a sus hijos en colegios públicos y laicos. «No deberíamos financiar con dinero público la religión en ningún centro escolar. La sociedad avanza hacia una laicidad en los centros educativos», ha sentenciado.
En la misma línea, José Luis Valero, de UGT, ha destacado que la religión «pertenece al ámbito privado» por lo que «no tiene lugar en la escuela pública» y ha pedido que en los centros escolares sostenidos con fondos públicos «no se le dé cobertura a la religión».
«Queremos que se ponga el foco en el expolio que arrastra la educación pública frente a los privilegios que se otorgan cada vez más a la privada concertada, siendo en la gran mayoría controlada por la Iglesia Católica y sus numerosas fundaciones», ha subrayado Esther, de Europa Laica.
Europa Laica ha advertido de que, hasta ahora, «no hay voluntad política en ninguno de los partidos que se dicen progresistas para hacer que esta urgencia democrática trascienda». «Las religiones no pueden invadir los espacios públicos y la solución no está en la multiconfesionalidad. La religión debe salir de los centros públicos y concertados», sentencia la organización.
Steilas, sindicato de Educación del País Vasco y Navarra, cree que es «necesaria» la libertad de conciencia y la separación entre la Iglesia y el Estado, por lo que exige que «el adoctrinamiento religioso esté fuera de las escuelas».
Durante su intervención, la secretaria técnica de la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Aragón (FAPAR), Nieves Burón, ha respaldado esta campaña «por el impulso que esto supone a la matriculación en la escuela pública como garantizadora de la igualdad de oportunidades y vertebradora en todo el territorio».
«La religión debe practicarse en el ámbito privado. La escuela debe ser un espacio común y libre de esos dogmas», ha apostillado Burón.
La Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Asturias tampoco está a favor de que se trate la religión en las escuelas públicas. «No nos parece el espacio adecuado para tratar estos temas. Para estudiar o practicar la religión hay otros espacios destinados para ello», apunta.