Cuando se acerca la época de Navidad, la tradición de adornar un abeto se mantiene viva en muchos hogares. Sin embargo, esta tradición a menudo va acompañada de gran cantidad de plásticos y elementos no reciclables, provocando una gran huella ecológica.
En el mercado, es posible encontrar ejemplares naturales y artificiales con diferentes tamaños, colores y acabados. En este sentido, durante los últimos años, los árboles artificiales se han posicionado como la elección preferida entre los compradores, por ser reutilizables y eliminar la tala de abetos. Sin embargo, estudios y discursos medioambientales recientes han desmentido dicha información debido al coste medioambiental en forma de CO₂ que causa este elemento de decoración.
En un esfuerzo para revertir esta situación nace el proyecto de Navet, una empresa innovadora que ofrece abetos naturales a domicilio y con un gran compromiso con el respeto al medioambiente y la sostenibilidad.
Ventajas de los abetos naturales en comparación con los artificiales
Una de las ventajas más destacadas del abeto natural es su belleza y apariencia única que añade un toque especial a la decoración navideña. Sus ramas verdes, su textura y el aroma característico a bosque son detalles que no pueden replicarse con exactitud en un abeto de plástico.
Por otra parte, el árbol artificial se fabrica a partir de materiales sintéticos no reciclables como el PVC, el cual puede contener sustancias tóxicas para el humano como el plomo. Asimismo, esta composición aumenta las emisiones de gases de efecto invernadero. Añadiendo el gran coste medioambiental de lo que supone su fabricación, el transporte internacional y luego la imposibilidad de reciclaje.
A diferencia de esto, los ejemplares naturales son sostenibles, ecológicos y de proximidad.
Después de las fiestas, el abeto natural puede ser reciclado o convertido en compostaje, de este modo, se evita la acumulación de residuos plásticos en los vertederos y se contribuye al cuidado del medioambiente. Al reciclarlo se convierte en compost o biomasa, regresando de una forma u otra a la naturaleza. Además, el abeto natural absorbe el dióxido de carbono y libera oxígeno fresco al ambiente, de hecho, un pino natural provee oxígeno a 18 personas todos los días. Esto ayuda a purificar el aire interior del hogar y de nuestro planeta, mejorando la calidad del aire.
Puntos a considerar en el momento de elegir un abeto natural
Existen algunos factores que las personas deben tener en cuenta antes de elegir el abeto natural adecuado. En este sentido, hay que considerar el tamaño del árbol, el espacio destinado a su instalación y la especie. Este último punto es clave para conocer sus cuidados y duración.
Empresas como Navet ofrecen abetos naturales con una gran variedad de tamaños, desde 75 cm hasta 300 cm. La especie mayoritariamente cultivada en el macizo de Montseny son Abies Nordmanniana, caracterizados por tener ramas fuertes y resistentes con abundante follaje, de tacto suave y suelen adaptarse bien dentro de nuestros hogares.
Por otra parte, la empresa ofrece grandes comodidades. Trasladan el árbol hasta la casa del cliente. Asimismo, una vez se terminen las fiestas navideñas, si la persona lo desea, la empresa puede recoger el abeto para reciclarlo y usarlo como abono para ayudar al medioambiente.