La productividad en la empresa es un factor clave en el crecimiento económico de cualquier negocio y que a veces suele ser subestimado. Se trata de la capacidad de producir lo máximo y mejor posible en determinado tiempo y con una cantidad de recursos asignados.
La agencia MarcaGo, especializada en la implementación de estrategias de posicionamiento SEO y publicidad en periódicos y medios digitales, a través de algunos artículos publicados en su plataforma web considera al establecimiento de los objetivos generales y específicos y a la diagramación del organigrama de una organización como factores relevantes para que una empresa sea productiva.
Definir metas claras es un punto clave en cualquier proceso de planeación estratégica
MarcaGo es una firma que se dedica a aplicar estrategias de posicionamiento digital en los motores de búsqueda de Google e implementa publicidad online creando contenidos publicitarios con enlaces web. En este marco, publicó un artículo referido a la importancia de formular los objetivos generales y específicos antes ejecutar cualquier investigación u acción estratégica.
Según señala la agencia de marketing, el trazado de ambas metas es una de las principales tareas del equipo de dirección de una empresa. El objetivo general – en términos coloquiales – surge de las necesidades identificadas, define el rumbo a seguir y marca hacia donde se dirige el proyecto. Este debe ir en sintonía a la misión y transmitir la visión de una organización, además de ser compartido por los empleados de la misma.
En tal sentido, los objetivos principales deben ser flexibles, claros, concisos, sin lugar a confusiones, y tienen que proyectar logros realizables. Asimismo, resulta esencial que sean medibles – ya sea en el tiempo, como en su desarrollo – para saber a futuro si se cumplieron o no.
El objetivo específico o táctico, en tanto, contempla al propósito a lograr y precisa los resultados o alcances que se buscan obtener en las diversas etapas del trabajo. De acuerdo a lo que remarca MarcaGo, este no solo tiene que ser coherente con el general, sino que también es preciso que respete un criterio lacónico, realista, medible y cuantificable en cuanto a los recursos asignados.
La productividad en la empresa, en efecto, puede verse afectada si su estrategia no es clara y si los diversos objetivos asociados a esta no son compartidos con su personal.
Cómo la estructura organizacional impacta en la estrategia de planificación
El organigrama encarna a una herramienta de planificación necesaria para el departamento de Recursos Humanos a partir de la cual se segmenta el trabajo y se determinan tanto las reglas como los niveles de jerarquía entre el personal que trabaja en una organización.
Según subraya MarcaGo en uno de sus artículos, este andamiaje jerárquico en el que se define el reparto interno de roles dentro de una compañía posibilita un conocimiento acerca del funcionamiento de la empresa y, en función de ello, coordina los aspectos de negocio y proyectos a cumplir. Asimismo, contribuye a optimizar la comunicación empresarial.
De esta manera, una organización con un organigrama establecido solucionará los inconvenientes con mayor celeridad porque habrá representantes de cada área que respondan ante situaciones operativas o administrativas.
Asimismo, el hecho de poder dividir y distribuir las diferentes tareas entre los empleados – desde los más grandes y generales a los más pequeños y específicos – convierte a las metas accionables que aseguran la evolución de una compañía.
En definitiva, MarcaGo deja entrever que una empresa no puede ser productiva si carece de una estructura organizacional y si las responsabilidades en su interior no son compartidas.