Mónica Oltra ha anunciado entre lágrimas que deja su cargo de vicepresidenta, portavoz y consellera de Igualdad en el gobierno valenciano y su acta como diputada de Les Corts tras su imputación en el caso del presunto encubrimiento de los abusos de su exmarido a una menor tutelada.
En una rueda de prensa que se ha producido de repente, antes de la ejecutiva de Compromís que iba a abordar su situación, la exvicepresidenta ha asegurado que «no quiere que se paren las políticas del Gobierno del Botànic» y ha considerado que la historia del caso «pasará a la historia de la infamia política, jurídica y mediática de este país». «Me voy con la cara bien alta sabiendo la infamia que esto, pero también con los dientes apretados, bien apretados», ha aseverado.
«No le voy a dar la coartada a nadie para poder decir unilateralmente que Compromís no forme parte del gobierno valenciano, porque gracias a Compromís este cambio se produjo en 2015», ha proclamado, y ha indicado que no quiere «que se paren las políticas contra la emergencia climática y la transición ecológica» de la coalición. «No hay Botànic sin Compromís», ha reivindicado.
A preguntas de los periodistas en una abarrotada sala de prensa, visiblemente emocionada, ha afirmado que en este mismo momento estaba trasladando su dimisión a Puig porque quería que todos se enteraran «en igualdad de condiciones» y que nadie «lo supiera hasta ahora». «Señor president, esta es mi decisión», le ha espetado.
Oltra ha sostenido que se ha generado un «ecosistema mediático» para justificar echar a Compromís del gobierno. «Yo no voy a ser la coartada», ha manifestado.
«GANAN LOS MALOS»
«Me cuesta esta decisión porque ganan los malos, el mensaje que estamos trasladando a la ciudadanía que estamos trasladando a cualquier político que quiera hacer política que no va a favor de los poderosos que se lo van a cargar con denuncias falsas, guerra sucia en los tribunales y con mentiras», ha aseverado. «Nos están fulminado uno a uno», ha agregado.
Oltra ha asegurado: «A mí lo que me duele es que la gente del pueblo se sienta abandonada. Estoy en política por la gente vulnerable, desde que estoy en política siempre he tenido claro que estoy por la gente vulnerable». También ha remarcado Oltra que esta decisión «se ha ido construyendo» y que comenzó a planteárselo «en el momento del escrito de la Fiscalía».
Al final de su comparecencia también ha querido dejar claro que para ella lo más importante es mirarse «al espejo todos los días» y poder dormir, así como que siempre hará «políticas que cuestionen el dogma neoliberal».
Preguntada por quién debe decidir la futura vicepresidencia del Consell tras su salida, Oltra se ha limitado a indicar que es algo que tendrá que hablar la ejecutiva de Compromís que se ha iniciado tras su rueda de prensa.
«NO NECESITO ESTAR AFORADA NI MUCHO MENOS»
Además, cuestionada por si se ha planteado no dejar el escaño de diputada para seguir siendo aforada, ha enfatizado: «Esto no va conmigo así, esto no va de dejar de ser aforada ni mucho menos. Yo no necesito estar aforada. Si no soy digna de estar en el gobierno, menos lo soy de estar en la cámara de representación popular».
E interpelada por su futuro a partir de ahora, ha recalcado que «estamos en este momento» y que su dimisión es «una decisión provocada por una de las mayores infamias que se han producido en este país». «No me pida más», ha zanjado, y en otro momento ha recomendado «ir a las hemerotecas» para saber la verdad cuando se han dicho «tantas cosas» sobre ella.
La ya exvicepresidenta ha llegado sonriente a la sede de Compromís en la plaza del Pilar de Valencia, donde desde las 16.30 horas estaban llamados a reunirse varias decenas de cargos en una ejecutiva convocada hace semanas, antes de la imputación, pero que pretendía abordar sus consecuencias ante la situación generada en el gobierno autonómico.