El arzobispo de Barcelona, el cardenal Joan Josep Omella, ha alertado este martes de «una mirada inquisitiva» en medios de comunicación y redes sociales buscando el error del prójimo, durante su homilía de la misa por la fiesta mayor de Barcelona, la Mercè.
«Parece que todos somos inquisidores al acecho del error de quien tenemos delante», ha lamentado Omella en la basílica de la Mercè, a la que han asistido el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y el alcalde, Jaume Collboni: .
En su homilía, Omella ha calificado de fantásticos los avances tecnológicos, pero «tienen una parte cuestionable» porque invitan a mirarlo todo desde una pantalla, ha dicho.
Ha lamentado uno de los problemas de las nuevas tecnologías: «Nos han cerrado la mirada. Podríamos llegar a decir que nos la han secuestrado».
«A menudo, nuestra mirada es demasiado crítica, que juzgamos y prejuzgamos a los que nos rodean, y hacemos comentarios que no ayudan a vivir en armonía con los otros», ha sostenido.
Ante esta situación, ha ensalzado figuras como la de la Virgen María en el ambiente familiar, laboral, «que miran y velan por el bien común, personas que trabajan para asegurar el bienestar y la comunión entre los ciudadanos».
«UNIDAD» DE CIUDADANOS E INSTITUCIONES
Al final de su homilía, ha pedido «superar miradas sesgadas» a todos los ciudadanos e instituciones civiles, públicas y políticas, y dar el paso para trabajar juntos.
«Necesitamos una mirada atenta, generosa, y que sea capaz de mirar a medio y largo plazo», y ha añadido que el cambio será posible si se avanza en generosidad y uniendo fuerzas en la misma dirección.
«NUEVAS FORMAS DE ESCLAVITUD»
Ha advertido de que hoy en día hay personas que «sucumben al yugo de la esclavitud y de las nuevas formas de esclavitud», como colectivos como ancianos y enfermos crónicos que viven solos, gente sin trabajo, personas que acaban de salir de la cárcel y son rechazadas, o mujeres y niños explotados por mafias de tráfico de personas.
También ha citado a jóvenes que viven «sin sentido» y se abocan a las drogas u otras adicciones, personas inmigrantes que buscan un lugar donde vivir, familias y jóvenes que no tienen acceso a una vivienda digna, o aquellos que viven en la calle buscando en basuras algo para comer.
ASISTENTES
Han asistido Collboni e Illa: un primer edil y un presidente del Govern no coincidían en la ceremonia desde 2014, el último año de mandato del alcalde Xavier Trias, que asistió a la misa con el presidente Artur Mas, y la alcaldesa Ada Colau nunca acudió a la ceremonia.
También han asistido los consellers de Presidència, Albert Dalmau, y de Justicia y Calidad Democrática, Ramon Espadaler; el delegado del Gobierno en Catalunya, Carlos Prieto; el presidente del Parlament, Josep Rull; el director general de Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero, y el jefe de Mossos d’Esquadra, Miquel Esquius; además de representantes del Ejército, Policía Nacional, Guardia Civil y Guardia Urbana de Barcelona.
A la misa, en la que ha habido una representación de gigantes y cabezudos de los Geganters de Barcelona, también han acudido los líderes municipales de Junts, Jordi Martí; PP, Daniel Sirera, y Vox, Gonzalo de Oro (mientras que ERC y BComú no han asistido), además de los tenientes de alcalde Laia Bonet, Maria Eugènia Gay, Albert Balle, Jordi Valls y Raquel Gil, entre otros.
