Ha sido un fin de semana complicado para los Departamentos de Defensa de Estados Unidos y Canadá luego de que se confirme el derribo de hasta dos objetos voladores no identificados (ovnis) en sus territorios, solo días después del vuelo de supuestos globos espías chinos.
El día 10 de febrero, uno de ellos fue derribado en la costa congelada de Alaska, mientras que el 11, un avión de combate estadounidense derribó otro sobre Canadá.
Pero ante el miedo general, es importante recalcar algunos puntos clave que se extraen de estas acciones. ¿Qué debemos saber sobre estos derribos?
Lo que se sabe de los ovnis derribados
¿Son naves extraterrestres?
Lo primero que debemos tener en la mente es que la palabra ovni no debe relacionarse necesariamente a extraterrestres, aunque en la cultura popular esta relación sea casi intrínseca.
Los objetos voladores no identificados pueden ser desde drones, fenómenos naturales, satélites o dispositivos secretos en pruebas de otros gobiernos. Es más, esta última acepción es la que más temor ocasiona en los gobiernos como el de Estados Unidos, principalmente por sus fuertes tensiones con otras naciones como Rusia y China, hecho por el cual los avistamientos, y en este caso los derribos, son estudiados con prioridad por las consecuencias que pueden tener a nivel de seguridad.
¿Cómo fueron avistados?
El objeto derribado el viernes en Alaska fue visto, en realidad, el jueves. El coordinador del Consejo de Seguridad Nacional para comunicaciones estratégicas, John Kirby, señaló a periodistas que el ente envió aviones de combate F-35 para investigarlo.
De acuerdo con Kirby, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó disparar y derribar un «objeto». A la hora de dar la orden, uno de los factores que preocupaba al mandatario era la altitud a la que volaba, de unos 12 kilómetros, y lo que le situaba a una altura en la que podía interferir con la trayectoria de aviones civiles, detalló Kirby.
Los pilotos luego dieron informes diferentes de lo que observaron, dijo la fuente informada sobre la inteligencia: mientras unos decían que “el objeto interfirió con sus sensores”, otros señalaban “que no había una forma de propulsión identificable y no podían explicar cómo se mantenía en el aire».
Por otro lado, el objeto en Yukon, Canadá, fue derribado por fuerzas estadounidenses debido a que se ubicaba en una zona fronteriza. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, decidió junto con el propio Biden derribarlo.
El objeto fue finalmente alcanzado con un misil AIM-9X de infrarrojos lanzado por un F-22 Raptor de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, que operaba junto con aviones CF-18 de la Fuerza Aérea de Canadá bajo las órdenes del Comando Norteamericano de Defensa Aeroespacial (Norad).
¿De qué forma eran?
Según CNN, los funcionarios señalaron que “era del tamaño de un auto pequeño” y era diferente al globo de vigilancia chino que fue derribado días atrás.
“Estamos llamando a esto un objeto porque esa es la mejor descripción que tenemos en este momento”, dijo Kirby. “No sabemos quién es el propietario, ya sea estatal, corporativo o privado, simplemente no lo sabemos”.
El segundo caso sí detalla una forma en específico: un cilindro.
«No sería prudente que especulase sobre el origen del objeto en estos momentos», explicó la ministra de Defensa canadiense, Anita Anand. que solicitó esperar hasta que las autoridades hayan analizado los datos para ofrecer más información.
¿Se han recuperado escombros?
En internet circulan supuestas imágenes de un camión transportando lo que sería el ovni derribado por las fuerzas militares. Todas son falsas.
Según el portavoz del Pentágono, el general Patrick Ryder, los equipos de recuperación ahora están recolectando los escombros que se encuentran sobre el hielo en las aguas territoriales de los EE. UU. en el caso de Alaska.
En el caso de la frontera canadiense, Canadá ya ordenó las operaciones de búsquedas y recuperación.
Un nuevo caso: China
Este domingo, un nuevo caso se ha añadido a esta serie de avistamientos: desde China.
El medio estatal The Global Times detalló el hallazgo de un ovni cerca a las costas de la provincia china de Shandong, al este del país.
Según el artículo, el ejército chino está preparándose para derribar el objeto en las últimas horas.
Será cuestión de días y semanas saber cuál es el origen de dichos objetos voladores no identificados. Lo recalcable es que, pese al misterio y lo paranormal, el caso se inclinará mucho más hacia la geopolítica y la disputa por la hegemonía de los países más grandes del mundo.
